Pareja irá 20 años a la cárcel por atentar contra vida de su hija

Para evitar posible fuga, los condenados estarán seis meses en prisión preventiva

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Una pareja tendrá que pasar 20 años en prisión por atentar contra la vida de su hija de un año y seis meses de edad, según la condena impuesta por el Tribunal Penal de Goicoechea.

La sentencia contra Minor Enrique Duarte Maltés, de 32 años, y Franciny Marie Jirón Arias, de 26, fue dictada este miércoles 6 de mayo.

Ambos fueron hallados culpables del delito de homicidio calificado en grado de tentativa y abuso de patria potestad.

Para evitar una posible fuga de los ahora sentenciados, el Tribunal les fijó seis meses de prisión preventiva. El plazo vencerá el próximo 6 de noviembre, confirmaron respectivamente la oficina de prensa del Ministerio Público y el Departamento de Comunicación del Poder Judicial.

Los jueces que participaron en este debate fueron Ileana Méndez Sandí, Rosaura García Aguilar y Franz Paniagua Mejía.

Antecedentes. La Fiscalía Adjunta de Goicoechea, encargada de esta investigación, informó de que los hechos juzgados sucedieron en el 2010.

Uno de los primeros indicios sobre una situación irregular fueron detectados el 1.° de junio de aquel año, cuando la pareja llevó a la menor, con lesiones varias, a un centro médico no especificado. Posteriormente, el 23 de setiembre, la pequeña ingresó en estado delicado al Hospital Calderón Guardia, lo que causó la intervención policial.

Un dictamen médico aportado como prueba durante el debate detalló que la menor presentaba moretones en los ojos, la frente, la nariz y la mejilla derecha, golpes en los oídos y sangrado en su cavidad oral. Para los jueces, la niña fue víctima de graves y reiteradas golpizas.

La menor tiene hoy seis años. Como medida de protección definida por el Patronato Nacional de la Infancia (PANI), la custodia fue dada a una de sus abuelas.