Nieto acusado de matar abuelo no quiso declarar

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Un joven de 25 años acusado de matar a su propio abuelo, se abstuvo ayer de declarar en la primera audiencia del juicio que se le sigue por homicidio calificado en el Juzgado Penal de San Ramón.

El crimen de Carlos Hidalgo Quesada, de 85 años, ocurrió el 5 de mayo del año pasado, 400 metros al noroeste de la Sede de Occidente de la Universidad de Costa Rica (UCR), en San Pedro de Alfaro, en San Ramón de Alajuela.

El adulto mayor estaba solo en su casa, ubicada dentro de una finca, donde vivía con su esposa.

Ayer, en el debate, declaró María Isabel Hidalgo, hija del fallecido y tía del imputado, quien presenció el crimen. Según manifestó la mujer, su sobrino, también de apellido Hidalgo, estuvo afilando cuchillos horas antes del homicidio.

Relató que entró a una de las habitaciones de la casa de su padre porque escuchó un ruido. En ese momento vio que su sobrino estaba apuñalando al anciano y, luego de eso, huyó hacia una finca cercana.

Estado mental. La fiscala Vanessa Dotti afirmó ayer al inicio del juicio que se debía discutir el estado mental del joven, quien habría estado drogado al momento del ataque.

Rodrigo Araya, abogado de la familia de la víctima, comentó que al muchacho se le realizaron algunas pruebas médicas que evidenciaron un cuadro de psicosis con capacidades mentales limitadas, dado el consumo de estupefacientes.

Sin embargo, no se pudieron usar como prueba los dictámenes que resultaron de esos exámenes debido a que les faltaba una firma.

La abogada defensora Johanna Araya sostuvo que los problemas de la niñez del joven pudieron haber repercutido en el homicidio.