Juzgado exonera a tres oficiales del OIJ por muerte de compañero durante entrenamiento en la Earth

Padre de fallecido califica la resolución como acomodada al sistema judicial, e insiste que había elementos para acusar

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El Juzgado Penal de Pococí exoneró de cualquier responsabilidad a tres oficiales del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) por la muerte de un compañero el 15 de mayo del 2015, durante un entrenamiento en la Universidad Earth, ubicada en Guácimo de Limón.

Así lo determinó el juez Johanner Chavarría Araya el pasado 31 de octubre, cuando dictó un sobreseimiento definitivo a favor de Roelis Reyes Pichardo, jefe de la Unidad de Protección de Víctimas y Testigos del OIJ, así como a dos instructores de dicho grupo policial, Manuel Roldán Calderón y Martín Castro Solís.

A estos oficiales se les había abierto un proceso judicial como sospechosos del delito de homicidio culposo por la muerte del agente Jesús Andrés Vega Zúñiga, de 26 años, cuando intentó cruzar un canal que estaba muy lleno de agua.

El hecho ocurrió durante una práctica de posicionamiento con GPS en montaña y mientras en la zona imperaba muy mal tiempo. Vega se desempeñaba como agente de la Unidad de Protección a Víctimas y Testigos (Uprov).

El sobreseimiento definitivo se dictó porque “no se han tenido por probados los hechos que venía investigando el Ministerio Público” detalla la resolución del juez. Con esta decisión el caso se archiva.

“Desde un principio este caso fue manipulado”

José Martín Vega Rojas, padre del fallecido, calificó la decisión del juzgado como acomodada al sistema judicial.

"Desde un principio este caso fue manipulado, manoseado desde las altas esferas del Poder Judicial. No tengo las pruebas para decir yo vi, pero este caso lo taparon por todos los medios. Lo minimizaron y ahora lo enterraron.

“Este caso se está resolviendo para que no salgan cosas a la luz pública y mucho menos que se sepa que se cometió un delito. Hay elementos suficientes para acusar” manifestó.

Por su parte, Francisco Dall’Anese Ruiz, abogado de los imputados en este asunto, lamentó la muerte de Jesús Andrés Vega, de quien dijo murió en cumplimiento de su deber.

Sin embargo, agregó: "Debo indicar que en 2015 la jerarquía del OIJ y de la Corte Suprema de Justicia se precipitaron pues, de cara a las noticias, entraron en pánico y buscaron culpables, cuando el hecho fue consecuencia de la fatalidad.

“Se dijo falsamente que el entrenamiento no estaba autorizado y se puso en entredicho a tres de los mejores policías de Costa Rica como son Rodrigo Castro, Roelis Reyes y Manuel Roldán.

"Hoy una sentencia judicial con claridad meridiana concluye que no se probó un solo cargo de los atribuidos a estos tres dignos policías. Siempre han sido inocentes. La Corte debería iniciar una investigación interna para determinar por qué se procedió con tanta ligereza contra estos tres honestos policías”, concluyó.

Aunque en diciembre del 2015 la familia había anunciado que iba a querellar pues consideraban que hubo negligencia y falta de cuidado, la abogada que representó a la familia, Myriam Bedoya Zarate, dijo que finalmente no concretaron la demanda pues así lo solicitaron los allegados.

Caso cerrado

Con esta resolución del Juzgado de Pococí, la muerte de Jesús Andrés Vega queda cerrada. Esto porque en julio del 2016, el Tribunal de la Inspección Judicial también había exonerado de cualquier responsabilidad a 10 oficiales del OIJ (incluidos Reyes, Castro y Roldán).

La pesquisa interna se hizo porque se alegó que el entrenamiento que involucró a oficiales Unidad de Protección a Víctimas y Testigos (Uprov) y de la Unidad de Vigilancia y Seguimientos (Uvise) se hizo sin estar en el cronograma de capacitación anual, no se tenía un protocolo para situaciones de emergencia y se alegó de que Vega se había negado a asistir por razones de salud. También se investigaron denuncias por supuestos maltratos.

En cuanto a lo sucedido el 15 de mayo del 2015, la Inspección Judicial determinó que un día antes de salir para el curso en la Earth, Vega llamó a Roelis Reyes y le comentó que no iba a asistir a la práctica porque no tenía dinero ni los implementos, pero acudió luego de que Reyes le consiguió todo lo que ocupaba.

Respecto al accidente en el canal lleno de agua, la pesquisa concluyó que el grupo de agentes colocó una cuerda (amarrada a dos árboles) para pasar por el lugar, pero Vega se “soltó de la cuerda sin explicación alguna y no pidió auxilio”. Otro agente, al ver la situación, se lanzó al agua pero no pudo rescatarlo.

También se descartó que en los entrenamientos se aplicaran castigos o maltratos, sino que se trataba a acondicionamiento físico apropiado para el tipo de trabajo que debían desempeñar los oficiales.

La muerte de Jesús Andrés Vega también generó que el OIJ creara dos documentos, uno para regular las prácticas policiales y otro que establece las pruebas físicas a las que deben someterse los agentes operativos entre ellos los de las unidades Uprov y Uvise.