Fiscalía: ‘Exgerente traicionó confianza de Banco Nacional’

Ministerio Público descartó que víctima sufriera amenazas para sustraer dinero

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

El Ministerio Público le reprochó al exgerente del Banco Nacional de Cóbano, Juan Carlos Quesada Salas, haber ‘traicionado la confianza’ de su patrono por supuestamente sustraer, el 21 de enero del año pasado, ¢375 millones de la caja fuerte de esa agencia utilizando su propia clave de acceso.

Así lo manifestó el fiscal de Delitos Económicos, Ólger Calvo, durante la etapa de conclusiones en el juicio al exfuncionario, cuando solicitó al Tribunal Penal de Hacienda una pena de 10 años de prisión por el delito de peculado, además de inhabilitar a Quesada para ejercer cargos públicos por ese mismo tiempo.

El exgerente laboraba con el Nacional desde 1984. La Fiscalía lo acusa por la aparente sustracción del dinero que estaba bajo su custodia, ya que para ese entonces tenía el recargo del tesorero, quien estaba de vacaciones.

Calvo resaltó que existe un video que “todo Costa Rica” conoce, ya que se difundió por la prensa, pero que, por alguna razón, nunca fue incorporado como prueba al proceso penal.

Según describió el fiscal, en esa grabación se observa a Quesada moviendo con un palo de escoba la cámara de seguridad de la bóveda –al parecer para no ser grabado– y luego prepara fajos de billetes que deposita en una caja de cartón, con la cual habría salido de la agencia.

Aunque no forman parte de la prueba, Calvo enfatizó que las escenas fueron descritas durante el debate por varios testigos que tuvieron acceso al video y narraron al tribunal los hechos.

El representante del Ministerio Públicos dijo que Calvo después utilizó un paso fronterizo ilegal para huir hacia Cárdenas, en Nicaragua, con el fin de “asegurar el patrimonio”.

Con ese dinero, sostuvo Calvo, se habrían podido construir unos 13.500 pupitres o un colegio para más de 250 estudiantes, como una manera de ejemplificar el daño social que se produjo con la pérdida de los fondos públicos.

En su intervención, también dijo que quedó descartado que Quesada haya sido víctima de coacción o amenazas extorsivas y calificó su acción de “‘sumamente desvergonzada”, ya que de su cargo se esperaba honradez y probidad.

Calvo enfatizó que no hubo ningún tipo de arrepentimiento por parte del exgerente, pues aunque se entregó después a las autoridades, “lo hizo sin el dinero”.

Otras voces. Alfonso Navas, representante del Banco Nacional, solicitó al Tribunal declarar con lugar la acción civil resarcitoria, de manera que se condene a Quesada a pagar ¢375 millones, más intereses (que hasta ayer sumaban ¢68 millones), además de las costas, estimadas en unos ¢37,6 millones.

Navas recalcó que el exgerente era la única persona que tenía a su disposición el dinero desaparecido. Para puntualizar sobre la situación financiera de Quesada, otro abogado del Banco, Federico Salazar, señaló que devengaba un salario bruto semanal de ¢248.000, pero solo recibía ¢16.000 netos debido a rebajos que no especificó.

Por su parte, el defensor de Quesada, José Miguel Villalobos, pidió la absolutoria de su cliente si no se logra comprobar con pruebas contundentes su participación en los hechos y aseguró que la acusación fue mal planteada.

Explicó que no solo Quesada tenía custodia del dinero, pues otro funcionario también poseía, supuestamente, una segunda clave para abrir la caja fuerte. Por eso solicitó a los jueces recalificar el delito de peculado a hurto.