En una votación dividida, el Consejo Superior de la Corte Suprema de Justicia acordó despedir al inspector judicial Jesús Ramírez Campos, por haber utilizado un carro oficial para acudir a un prostíbulo.
La decisión de revocarle el nombramiento fue tomada en la sesión del pasado jueves.
Ramírez, de 46 años, fue sorprendido el 6 de mayo del 2015 en el burdel, durante un operativo contra la explotación sexual que realizó el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) en Alajuela.
Aunque los cinco miembros del Consejo consideraron que la falta fue “gravísima”, no todos coincidieron en el tipo de castigo que se debía imponer.
Los integrantes que optaron por cesarlo fueron: Zarela Villanueva, presidenta de la Corte; Alejandro López, representante de los jueces, y Milena Conejo, delegada de los abogados del Poder Judicial.
Entre tanto, Ramiro Salvador Arauz, miembro de los abogados litigantes, y Carlos Montero, quien es vocero de los trabajadores judiciales, consideraron que se le debía suspender por tres meses sin goce de salario, según información dada por la oficina de prensa del Poder Judicial.
Ramírez Campos, quien es hijo del magistrado de la Sala Tercera, Jesús Ramírez Quirós, laboraba en la Inspección Judicial investigando quejas sobre la conducta de los servidores.
El ahora exfuncionario también afronta una causa en el Ministerio Público por el delito de peculado.
Criterios. El voto de la mayoría se basó en el Estatuto de Servicio Judicial, el cual establece que el servidor judicial debe conducirse de manera digna, tanto en su vida laboral como privada y que las incorrecciones que afecten el buen servicio o la imagen del Poder Judicial acarrean la destitución.
Por otro lado, el criterio de la minoría fue que, por razones de razonabilidad y proporcionalidad, se le debía aplicar una sanción menos severa.
Durante el proceso disciplinario, la defensa de Ramírez alegó que el funcionario tenía un problema de salud.
Asimismo, argumentó violación al debido proceso, pues indicó que no se recibió prueba de la defensa. No obstante, esos motivos fueron rechazados en el Consejo Superior por unanimidad.
Ayer se intentó conocer una reacción de Rodrigo Araya, abogado de Ramírez; sin embargo, manifestó que no se referiría porque aún no han sido notificados.
Casualidad. La falta de Ramírez trascendió por casualidad, pues, mientras los agentes de Alajuela hacían vigilancia al prostíbulo, observaron a Ramírez llegar al sitio en un auto del Poder Judicial.
El funcionario ingresó al local, estuvo ahí durante una media hora y se fue.
La Policía ingresó luego y detuvo a un hombre y a dos mujeres por trata de personas con fines de explotación sexual.
Esta es la segunda vez que al inspector se le sanciona, pues en el 2011 se le suspendió durante 30 días por alterar datos de giras con el fin de cobrar viáticos de más y ausentarse del trabajo.
Aunque la Inspección Judicial había determinado que procedía el despido, el Consejo Superior redujo el castigo.