Los 6.000 reos que están en el complejo penitenciario La Reforma, en San Rafael de Alajuela, cumplen este jueves cinco días sin tener agua, confirmó el director de Adaptación Social, Reynaldo Villalobos.
El faltante del líquido se debe a que, desde el sábado por la tarde, se dañaron las dos bombas que regulan el abastecimiento en el centro carcelario.
El inmueble cuenta con dos pozos propios. Cada uno de estos trabaja con una bomba encargada de impulsar el agua hacia los tanques de suministro.
Villalobos explicó que el proceso para instalar otras bombas es bastante complicado, porque se requiere mucha precisión.
Por eso se ha tardado el arreglo, cedido a una empresa contratada (no recordó el nombre) para colocar equipo nuevo y que labora en eso desde este lunes.
“Los pozos están a 140 metros de profundidad, eso ya implica mucha dificultad. En estos días se sacó una de las bombas que estaba en el pozo número dos y estamos introduciendo la nueva bomba para ver si nos resulta la situación. Mañana (este jueves) estaríamos haciendo pruebas a ver qué tal sale todo”, detalló Villalobos.
En caso de que tengan resultados positivos, los técnicos comenzarían a trabajar en la sustitución, en el primer pozo.
“Los técnicos nos recomendaron hacer las reparaciones en diferente tiempo, porque si no, todo se podría salir del control”, agregó el jerarca.
Sin promesas. Por todo lo anterior, Villalobos señaló que sería muy aventurado decir en qué momento se normalizaría el suministro de agua.
“Se ha actuado de manera acelerada y esperamos resultados pronto para seguir normales y darles el líquido a todos los centros de ese complejo (cuatro en total)”, expresó.
Mientras terminan de arreglar los daños, Villalobos afirmó que tienen a disposición camiones cisterna para que les suministren agua.
“Estamos haciendo lo necesario para que no haya problemas con la población (penitenciaria)”, concluyó.