Entrenamiento militar de ruso sorprendía a delincuentes

Comerciante extranjero que enfrentó asaltantes a balazos varias veces falleció por problema cardíaco

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El comerciante ruso Alexander Saltykov, de 61 años, murió el 30 de setiembre, pero dejó el recuerdo de sus enfrentamientos temerarios con delicuentes que desde 1998 llegaban a tratar de asaltar sus locales comerciales ubicados en San Francisco de Dos Ríos, Curridabat y Zapote.

En San Francisco el minisúper Yulia abría las 24 horas, por lo que algunos ladrones llegaban a avanzadas horas de la noche a intentar robar artículos o el dinero de la caja y se veían sorprendidos por el dueño que, arma en mano, defendía el local.

Los delincuentes no se imaginaban que Saltykov fue soldado del ejército ruso y además de un excelente manejo de armas, estaba entrenado para defenderse aunque estuviera en desventaja numérica, como ocurrió en varias ocasiones.

Según Kattia Martínez, vecina de San Francisco, era un hombre muy amable, pero cuando tenía que intervenir por otras personas lo hacía.

Otro de sus clientes, Jorge Solano, dijo que se sentía muy seguro cuando iba a comprar a ese minusúper.

Entre las ocasiones en que le tocó defenderse de los ladrones estuvo la del jueves 12 de noviembre de 1998 cuando tres hombres armados llegaron al minisúper que tenía en ese entonces en Lomas del Sol en Curridabat y -tras empujar a la hija del ruso y tirarla al suelo- intentaron robar, pero el hombre disparó al asaltante y persiguió a balazos a los otros dos.

El ladrón herido falleció en el Hospital y fue identificado como Marlon Castillo Cordero, de 19 años.

En el 2001 Saltykov tenía otro local en San Francisco de Dos Ríos y fue visitado por hampones a los que ahuyentó a balazos.

Los videos de sus locales comerciales dejaban grabada la acción y le servían de prueba ante las autoridades que podían observar lo ocurrido.

Sus intervenciones también ayudaron a otros, como en el caso en que de manera solidaria el ruso evitó que asaltaran una estación de servicio en San Antonio de Desamparados en el 2002. Cuando vio que iban a asaltar al pistero, Saltykov empezó a disparar y al ladrón lo encontraron herido a unos 200 metros. Falleció luego en el Hospital San Juan de Dios.

El último caso ocurrió en el 2006 cuando cuatro colombianos llegaron a un local que tenía en Zapote. Con ayuda del ruso la Policía detuvo a los delincuentes.

Saltykov era originario de Moscú y tenía la nacionalidad soviética. En algunas ocasiones resultó baleado, pero superó todas la pruebas.

Sus destrezas y manejo de armas le permitían ser la excepción en la regla policial de no oponer resistencia a un asalto.