Limón. El entrenador de Limón, Luis Fernando Fallas, salió de las oficinas del Limón F.C. pocos minutos después de escuchar el fallo de 12 años de prisión contra el presidente del equipo, Carlos Hodwen Pascall, por el delito de legitimación de capitales.
"Teníamos mucha fe y esperanza de un resultado diferente", dijo Fallas, quien escuchó la sentencia de los jueces acompañado de su esposa y sus dos hijas.
"Las niñas lo tomaron mal, una de ellas lloró, tiene 12 años", dijo el entrenador, quien conversó con La Nación frente a las oficinas del equipo de Limón F.C. con un tono pausado.
Su equipo recibirá a los jugadores de Santos de Guápiles, este domingo, en el Estadio Juan Gobán.
De cara el encuentro, Fallas mostró confianza aunque reconoció que para los jugadores es una "dura noticia la condena del Pascal".
"Ahora más que nunca ocupamos el apoyo de la afición. Los jugadores son muy profesionales, y estoy muy satisfecho con su trabajo", agregó Fallas.
Además de su familia, el entrenador estuvo acompañado del jugador Jesús Camacho, así como, de los brasileños Iván Leoncio, Rodrigo De Sousa y Fernando Cardoso, así como, del jugador, Juan Diego Ruíz.
La Nación intentó conversar con Camacho, sin embargo, minutos antes de dar sus declaraciones, recibió la siguiente instrucción del entrenador Fallas: "Lo siento, la administración me acaba de indicar que no podemos conversar con la prensa sobre este tema, disculpe".
Camacho y el entrenador se retiraron, mientras una empleada salió a cerrar las puertas y ventanas de las oficinas del equipo limonense.