Santa Cruz, Guanacaste. Dos hermanas fallecieron el domingo en la tarde como consecuencia del choque del vehículo en el cual viajaban contra un autobús en Soncoyo, en Santa Cruz, Guanacaste.
La Cruz Roja las identificó como Mendy Rodríguez López, de 21 años, y su hermana Scarly, de 11.
Al parecer, el automóvil Hyundai en el que iban derrapó en una curva y se estrelló contra un autobús que iba a playa Tamarindo.
“En fracciones de segundo, el carro se me cruza al lado mío y traté de esquivarlo, pero se fue rastrillado por todo el costado del bus”, manifestó Jorge Duarte, chofer del vehículo de servicio público.
En el accidente resultaron heridos los otros ocupantes del vehículo: un menor de siete años, hermano de las víctimas; la madre de los tres, identificada como Jeannette López, de 44 años, y un extranjero, de apellido Musch, quien al parecer era el conductor y novio de Mendy Rodríguez López.
Miembros del Cuerpo de Bomberos de Santa Cruz debieron utilizar equipo especial para liberar del vehículo a los heridos, quienes fueron trasladados en condición delicada al Hospital de La Anexión, en Nicoya, y luego a San José.
Cuando los cruzrojistas llegaron al sitio, atendieron a la menor de 11 años, fuera del carro, pero perdió la vida minutos después.
Por su parte, la joven Rodríguez López falleció en el asiento posterior del automóvil.
Las hermanas Rodríguez y su familia andaban de vacaciones en Guanacaste, donde disfrutaron de las fiestas típicas de Santa Cruz. El domingo se dirigían hacia su casa de habitación en Cocorí de San Francisco, Cartago.
José Luis Figueroa, vecino cercano de la familia, expresó que al escuchar la noticia le informó de inmediato a Rodolfo Rodríguez, padre de las jóvenes, quien no estuvo de vacaciones con la familia.
“Fue muy duro tener que informarle al señor de esta tragedia. Lo conmovió mucho el haberla recibido. Ellas eran muy buenas personas; la de 21 años no trabajaba y estaba dedicada al hogar junto con su mamá, doña Jeannette”, comentó.
“La chiquita iba para sexto grado en la escuela de Cocorí. Muchas veces se le veía jugar en la plazoleta de la comunidad; era muy inteligente y formaba parte de los Scouts”, agregó.
Gerardo Obando, otro vecino de la familia, manifestó: “Fue muy conmovedor recordar cuando la familia salió de paseo y ahora tener que verlos regresar así”.
Colaboró el corresponsal en Cartago Jorge Umaña