San Carlos (Redacción). Un chofer de apellido Moya, que manejaba un bus de la ruta Pital Ciudad Quesada con 53 pasajeros abordo, fue detenido hoy a las 9 a.m. por sospecha de que estaba bajo los efectos del licor.
Agentes de la Policía de Tránsito interceptaron la unidad de transporte público a escasos 300 metros de arribar a la Terminal de Ciudad Quesada, después de haber recorrido 30 kilómetros desde su punto de partida en Pital.
Los oficiales Francisco Arias y Henry Hidalgo intervinieron tras recibir una llamada que alertaba de la aparente infracción a la Ley de Tránsito.
Arias reveló que la primera prueba de aliento que le hizo a Moya marcó 0.91miligramos de alcohol por litro de sangre y la segunda registró alrededor de 0.85 miligramos.
El resultado de la prueba de sangre que a solicitud del Ministerio Público, se le hizo posteriormente en el laboratorio del Hospital San Carlos, no trascendió pues primera debía conocerla el Fiscal a cargo del caso.
Esta tarde Moya permanecía detenido a la orden de la Fiscalía mientras que el autobús propiedad de la empresa Autotransportes San José San Carlos fue llevado a la Delegación de Tránsito luego de que otro chofer autorizado llevó a los pasajeros a la Terminal.
Moya, quien tiene 30 años de manejar autobús, reconoció ante la prensa que cometió un error al tomar el volante luego de haber asistido anoche a una actividad social.
Hablando normalmente y sin mostrar dificultad para caminar y mantenerse en pie, Moya afirmó que no estaba ebrio.
“Si la alcoholemia dio positivo se debe a los efectos de la bebida que consumí la noche anterior pero insisto en que me sentía en óptimas condiciones para trabajar”, argumentó.
Una pasajera, Mariela Rodríguez, vecina de Las Delicias de Aguas Zarcas, dijo que lo único anormal que notó durante el viaje hasta Ciudad Quesada, es que el bus circulaba muy lentamente.