La Red Sismológica Nacional (RSN) advirtió de que el volcán Turrialba mantiene un constante aumento en su actividad.
Los vulcanólogos observaron este comportamiento en una visita que realizaron, el viernes pasado, a esa zona junto con miembros de la Comisión Nacional de Emergencias (CNE), del Servicio Nacional de Salud Animal (Senasa) y del Sistema Nacional de Aéreas de Conservación (Sinac).
Guillermo Alvarado, vulcanólogo, dijo que las cenizas contienen hasta un 12% de magma, lo cual significa que este material está cerca de la superficie.
“Desde octubre del 2014, el volcán ha incrementado las erupciones, pero, en los últimos días, hemos visto que emana gases, ceniza y rocas más de 15 veces al día”, recalcó Alvarado.
El vulcanólogo resumió que el Turrialba ha tenido tres periodos de cambio: el primero fue de 1996 al 2009: el segundo, del 2010 al 2013, y, el tercero, del 2014 a la actualidad.
Preparados. Las autoridades están preocupadas por la situación, pero afirmaron que tienen planes para enfrentar una eventual emergencia.
Por ejemplo, Iván Brenes, presidente de la CNE, aseguró que han fortalecido las medidas de seguridad para tener un mayor control de lo que sucede en las cercanías del cráter.
Asimismo, el Sinac comunicó que su plan es comprar 1.500 hectáreas de terreno que están al costado oeste del volcán.
Miguel Salazar, vocero de esa entidad, explicó que dichas propiedades son las que se ven más afectadas cuando hay erupción.
“Ese terreno es cubierto por la pluma de vapores y ceniza que lanza el volcán”, justificó.
Para esa adquisición, el Sinac tiene destinado un presupuesto de ¢1,700 millones, agregó Salazar. “Estamos por hacer el plan y montar una estrategia de compra”, señaló.
Por su parte, Senasa informó de que ha contabilizado 266 cabezas de ganado en zonas de alto riesgo y cercanas al volcán. De esa cantidad, ya han reubicado a 60 animales.
El ganado restante será redistribuido, solo en caso de que haya otra erupción, detalló Allan Sánchez, director regional de esa institución.
“Por los eventos anteriores que se han dado, hemos invertido ¢36 millones para darles asistencia a las fincas, ya que se ha afectado mucho el pasto en zonas como La Picada y Los Quemados”, agregó el funcionario.
Por el lado educativo, las autoridades detallaron que, por el momento, no suspenderán las lecciones; solo mantienen una vigilancia preventiva.
Rónald Ramírez, del Ministerio de Educación Pública (MEP), expresó que las 31 instituciones del cantón están preparadas para enfrentar una emergencia.