Usar celular robado a Jairo Mora delató a sospechosos de crimen

Un imputado activó el teléfono tres días después de ocurrido el asesinato

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Utilizar un teléfono celular robado a Jairo Mora Sandoval fue el elemento fundamental que tuvo la Policía Judicial para identificar y capturar a los sospechosos de asesinar al ambientalista, el 31 de mayo pasado.

Además, dos personas que están como testigos protegidos suministraron datos, tanto de los hombres que estuvieron en el sitio del crimen en playa Moín de Limón, como de las amenazas previas que recibió Mora de parte de un sujeto dedicado a robar, para luego vender huevos de tortuga.

Estas pruebas constan en diferentes informes incluidos en el expediente 13-001070-0063- PE, que lleva el Ministerio Público sobre el homicidio.

Jairo Mora, de 26 años, fue asesinado la madrugada del 31 de mayo en medio de una disputa por la apropiación de los huevos de tortuga, según informó Francisco Segura, director del Organismo de Investigación Judicial (OIJ).

El 31 de julio pasado se detuvo como sospechosos del crimen a seis individuos de apellidos Salmón de 28 años; Aráuz de 38; Cash de 27; Delgado de 19; Centeno de 24, y Quesada de 19. Estos individuos enfrentan cargos por homicidio calificado, violación y robo agravado, entre otros.

En el caso figuran como implicadas dos mujeres apellidadas Chavarría de 27 años, y Delgado de 23, que están libres. A ellas se les atribuye el delito de receptación.

Enlace. En los informes preparados por la Policía Judicial, destaca que a Jairo Mora le robaron un teléfono marca Samsung, modelo Young, que es táctil y tenía una clave de bloqueo.

El OIJ, mediante pesquisas, determinó que a ese teléfono le quitaron el chip que usaba Mora y le pusieron otro, que estaba utilizando uno de los implicados, de apellido Quesada. El aparato lo activó el hombre tres días después de haber ocurrido el homicidio.

Conociendo el número de teléfono de Quesada, la Policía Judicial obtuvo de una empresa telefónica copia de los correos enviados y recibidos, así como de las llamadas de ese número. Así pudieron establecer que contactó el 30 y 31 de mayo a otros dos implicados. Todos los contactos que hizo usaron la radiobase telefónica que está en Moín.

En los documentos judiciales también consta que la noche del 30 de mayo pasado, oficiales del Grupo de Apoyo Operaciones (GAO) detuvieron a las 9:45 p. m., en el sector de La Laguna, en Moín, un vehículo marca Suzuki, donde iban Aráuz, alias Renco, y Delgado conocido como Willy. Ese mismo carro fue visto por un testigo la madrugada del 31 de mayo, a las 3 a. m., cuando salía del sector La Laguna hacia Moín.

Las autoridades determinaron que entre los seis presos hubo 250 llamadas o envío de mensajes telefónicos, entre el 1.° de mayo y el 16 de junio. Con lo anterior, demuestran que existía una continua comunicación entre los implicados. El estudio mostró un pico de contactos el 30 y 31 de mayo.

Las autoridades judiciales sostienen que hay otras evidencias que complementan ese enlace.