Muerto en Moravia era socio del exconvicto Ricardo Alem y había pagado para evitar juicio

Sujeto de 59 años perdió la vida en el hospital luego de recibir múltiples impactos en tiroteo cerca del parque de Moravia donde una mujer salió herida

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El hombre que falleció luego de un tiroteo en las inmediaciones del Banco de Costa Rica, en San Vicente de Moravia este viernes, era un “viejo conocido” en los estrados judiciales.

Se trata de Heriberto de Jesús Gutierrez Castro, de 59 años. El sujeto es citado en resoluciones judiciales desde 1999 por casos que van desde falsifación de cheques hasta trafico internacional de drogas. Descontó prisión preventiva en varias ocasiones en que se le detuvo y en algunos juicios quedó libre pero no por certeza de los jueces, sino por el beneficio de la duda (in dubio pro reo).

Más recientemente, en el 2008 Gutiérrez Castro, quién era un exagente del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), fue vinculado con una banda de narcotraficantes liderada por el exconvicto Ricardo Alem León, quien estuvo preso por narcotráfico en Estados Unidos y condenado también en nuestro país por lavado de dólares. Alem fue el delegado de Costa Rica ante el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) en el primer gobierno de Oscar Arias (1986-1990).

Heriberto Gutiérrez pagó ¢100 millones al Banco Nacional (BN) para evitar ir a juicio por millonarias estafas. El hombre fue investigado entre 1998 y 1999 por fraudes en perjuicio de varios bancos, tanto estatales como privados. El daño económico causado en esa ocasión fue estimado por el OIJ en unos ¢500 millones.

El reporte del tiroteo que cobró la vida de Gutiérrez lo recibió la Cruz Roja a las 10:21 a. m. por lo que de inmediato trasladaron unidades al sitio, las cuales llegaron rápidamente pues la sede de la Cruz Roja está muy cerca de donde ocurrieron los hechos.

Al llegar, habían dos pacientes baleados que fueron trasladados graves al Hospital Calderón Guardia. Sin embargo, a su arribo al centro médico, Gutiérrez ya no tenía signos vitales. La mujer, preliminarmente identificada como de apellidos Torres Gutiérrez, colombiana nacionalizada, de 23 años, se reporta estable.

La Fuerza Pública y la Policía Municipal custodiaron el sitio hasta que llegaron agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) que recolectaron indicios y testimonios, así como los videos de las cámaras de seguridad para tratar de dar con los pistoleros en fuga.

El Ministerio de Seguridad informó que la Fuerza Pública desplegó en vano un dispositivo para tratar de encontrar a los sospechosos que al parecer huyeron primero en moto y luego en un vehículo que los esperaba cerca. Eso permitió localizar a menos de tres kilómetros una moto abandonada, que los agentes custodiaron y luego entregaron al OIJ, para determinar si fue la utilizada en el crimen.

Gutiérrez fue atacado cuando se iba bajando de su vehículo, un Ford blanco, valorado en más de ¢15 millones que quedó muy cerca de la sucursal del BCR cuando le dispararon. Recibió unos seis impactos en el tórax y otras partes del cuerpo.

La mujer, que iba caminando cerca, también resulta herida de bala en la espalda y brazos. Se investiga si se trata o no de una víctima colateral, pero serán las autoridades del OIJ las que lo determinen.

Por ahora el caso se investiga como un ajuste de cuentas, pero la investigación apenas comienza.

Este nuevo asesinato eleva a 438 los casos cometidos este primer semestre del año, la mayoría con armas de fuego y por ajustes de cuentas.

Este es el segundo caso de esta semana en que personas inocentes de ciudades muy céntricas y muy pobladas se ven expuestas a la acción del hampa, pues el lunes pasado poco antes de las 2 p. m. en Barrio Nuevo de El Tejar de El Guarco, Cartago, dos delincuentes en moto mataron a otro veinteañero.

Ese día tres escolares corrieron para escapar del tiroteo, mientras que el comerciante Marco Tulio Abarca, dueño de una soda, su hija que trabaja en el local contiguo y la empleada de don Marco, Ana Yancy Rivas, estuvieron a escasos metros de donde impactaron las balas que acabaron con la vida de Jesús Santander Villamizar.

El cantón de Moravia no registraba en lo que va del año ningún homicidio. El año pasado solo tuvo tres, igual cifra que en el 2021, por lo que es de los cantones josefinos con menos incidencia en este tipo de delitos.