Los restos óseos hallados este lunes dentro de una fosa en Suerre de Jiménez, en el cantón limonense de Pococí, corresponderían a un peón nicaragüense desaparecido desde enero en esa zona.
El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) indicó que será Medicatura Forense la que determinará si pertenecen a William Duarte Gaitán, de 57 años, conocido como Misquito.
Él era peón en una finca en ese mismo sector, por lo que las autoridades sospechan que podría tratarse de la quinta víctima de Florentino Elizondo Ríos, de 40 años, detenido el domingo en las montañas de Bribrí luego de estar en fuga varios días por otro crimen.
La desaparición de Duarte no fue denunciada, pero una hija le dijo al OIJ que lo vio por última vez en diciembre. Ella pensaba que él se había ido a Nicaragua.
Los agentes judiciales realizaron ayer la extracción de los restos gracias a datos aportados por un sujeto que, al parecer, le ayudó a Elizondo a enterrarlos.
Búsqueda. Al mismo tiempo, otro grupo de 40 personas, entre agentes judiciales, de la Fuerza Pública y familiares, buscaba a Santiago Gerardo Campos Oviedo, de 57 años, y Gonzalo Laguna Vega, de 59, desaparecidos en setiembre en la misma zona montañosa.
El rastreo se realizó en precipicios cercanos al río Guácimo, por informes de que allí fueron lanzados, aunque no hubo éxito.
Un hermano de Campos señaló que este lunes la familia recibió una llamada del OIJ para que se trasladaran al lugar para participar en el operativo.
“Estamos muy tristes. Tenemos un mes y dos semanas de estar en la búsqueda de mi hermano. La familia siempre ha estado muy anuente en venir a ayudar a buscar a mi hermano. Él tiene de estar aquí como 20 años y nunca hemos vivido una cosa de estas. Para nosotros es preocupante porque no creemos que todo esto haya pasado aquí”, expresó Rodrigo Campos.
Relató que él nunca conoció a Elizondo, pero su hermano Santiago sí habría tenido una buena relación con el ahora sospechoso. “Hasta tomaban café, pero no fue una amistad de muchos años”, dijo.
Según Campos, Laguna había sido contratado por su hermano para que le ayudara en la finca, dos semanas antes de desaparecer.
Otras muertes. El 14 de octubre anterior fueron asesinados José Luis Torres Torres, de 21 años, y José García García, de 23, en Rancho Grande de Paraíso, Talamanca. Sus restos aparecieron el jueves.
Un testigo de los crímenes alertó a la Policía sobre el punto donde sucedió el ataque y señaló como responsables a tres hombres, entre ellos a Elizondo, quien huyó.
Los otros dos, de apellidos Castellón y Gómez (ambos de 18 años), fueron capturados en un retén. Aunque cumplían un año de prisión preventiva, al primero lo liberaron el domingo y a Gómez le rebajaron el periodo a dos meses.
Por esos dos homicidios, el lunes Elizondo fue enviado a seis meses de prisión preventiva, que se sumarán a otros tres meses por el asesinato del chofer de autobús, Helbert Álvarez Briceño, en el 2013.
El OIJ además cree que Elizondo está relacionado con la muerte de Rafael José Molina Rojas, hallado el 12 de setiembre, en Suerre.