Cinco individuos encapuchados robaron ¢80 millones de la oficina del Banco Nacional de Costa Rica (BNCR) en Río Frío de Horquetas de Sarapiquí, Heredia, informó el Organismo de Investigación Judicial (OIJ).
El atraco se produjo poco antes de las 8:00 a. m., cuando los ladrones que se encontraban simulando realizar transacciones en el cajero automático, a un lado de la entrada principal de la agencia bancaria, aprovecharon que se abrió la puerta de entrada de empleados para ingresar a las oficinas.
Los individuos, que portaban pistolas y una escopeta, obligaron a los empleados a tirarse al suelo. Al mismo tiempo se apoderaron del dinero que había en las cajas y en la bóveda.
Cuando iban saliendo dispararon contra un vigilante y un cajero que estaban acostados en el piso y boca abajo, dijo el ministro de Seguridad, Gustavo Mata Vega.
"Estos sujetos al ir saliendo disparan a dos personas cuando están en el suelo. No ocasionaban ningún riesgo, sin embargo, les disparan. Se ve una violencia desmedida por parte de estos antisociales. Nada justifica un balazo sobre nada", agregó Mata.
El más grave era el vigilante, quien recibió el impacto en el tórax. Los afectados fueron trasladados a la Clínica de Río Frío, en Heredia, y luego al Hospital de Guápiles. Durante la tarde se informó que los heridos estaban estables.
Los ladrones abordaron un vehículo de color negro que estaba parqueado frente a la sucursal. Ese carro fue abandonado a 300 metros de distancia a un lado del río San José. El carro es un JAC, que al parecer tiene denuncia por robo.
En ese lugar abordaron otro automotor, un Toyota Yaris que fue localizado posteriormente en un bananal en Finca Dos de Horquetas. Ese auto estaba muy cerca del río Sucio. Se presume que allí los sujetos subieron a otro carro o cruzaron el río para luego huir hacia Pococí.
Apenas trascendió el asalto, oficiales de la Fuerza Pública realizaron un amplio operativo que abarcó sobre todo fincas bananeras.
Gustavo Mata dijo que se detuvo a dos individuos que salieron huyendo cuando notaron la presencia de oficiales de la Fuerza Pública. Sin embargo, esos dos hombres fueron liberados durante la tarde de este lunes confirmó el OIJ. Esto luego de identificarlos y de verificar el sitio donde viven.
Igualmente, la Fuerza Pública capturó a un tercer sospechoso en un puesto de control que se colocó cerca del túnel Zurquí, en la ruta 32, que une a San José con Guápiles. Este hombre tenía las manos y la ropa manchadas con pintura, que se presumía podría ser de un polvo químico de seguridad que usan bancos en los fajos de billetes como seguridad ante un robo. Empero, luego de un análisis por parte de agentes del OIJ, se determinó que la pintura era de otro tipo.
En un comunicado, el Banco Nacional solamente informó que en este caso los empleados actuaron conforme a los protocolos de seguridad establecidos por la entidad.
Se explicó que el oficial de seguridad herido pertenece a una empresa de seguridad privada. El vigilante, al momento del asalto, no portaba ninguna arma de fuego.
A las 10 p.m., agentes del Servicio Especial de Respuesta Táctica (SERT) irrumpieron dentro de una vivienda situada a 50 metros de donde dejaron abandonado el Toyota Yaris.
Allí lograron la aprehensión de cinco sujetos, los cuales estaban armados. No se conoció si portaban parte del botín sustraído. Tres de los hombres estaban en la parte trasera del inmueble y dos en el corredor.
Minutos antes, negociadores del OIJ conversaron con los sospechosos con la ayuda de un megáfono.
Uno de los sujetos detenidos estaba herido, por lo que fue trasladado en una ambulancia de Puerto Viejo de Sarapiquí, primero a la clínica local y luego al Hospital de Guápiles. Cuatro motorizados de la Fuerza Pública y dos patrullas se encargaron de su traslado.