Un hombre publicó en una página de Internet que vendía dos perros de raza pug. Cada uno, indicó en la oferta, costaba ¢300.000.
Unos sujetos mostraron interés en los caninos y contactaron al vendedor. Después de una conversación telefónica, quedaron en reunirse el domingo 14 de mayo en el parqueo de un restaurante de comida rápida, ubicado en Sabana Sur.
No obstante, cuando se encontraron en ese sitio, los supuestos compradores sacaron un arma y le robaron los dos perros. El dueño de los caninos acudió al Organismo de Investigación Judicial (OIJ), donde interpuso la primera denuncia que se ha recibido por una situación similar.
Como parte de la investigación, los agentes descubrieron que ese hecho quedó grabado por una de las cámaras del local.
Ese video fue dado a conocer durante este jueves por el OIJ, el cual solicitó la colaboración de la ciudadanía para dar con el paradero de los sospechosos.
En esa grabación se observa cuando los dos sujetos llegaron en un carro oscuro hasta el restaurante. Ellos viajaban como acompañantes.
Cuando se bajaron del auto, el chofer se quedó esperándolos. Cerca de dos minutos después, los sujetos regresaron corriendo al vehículo. Uno de ellos portaba la caja transportadora con los animales.
El OIJ indicó que, en caso de tener información sobre los asaltantes, puede brindarla al teléfono 800-8000-645 del Centro de Información Confidencial.
Situación conocida
Rubén Rodríguez, presidente de la Federación Canina de Costa Rica, comentó que esta no es la primera vez que escuchan de una situación similar.
Según dijo, a sus oficinas han llegado cinco reportes en los últimos meses, los cuales indican que un grupo de asaltantes roban perros en Alajuela y Heredia.
"Tenemos conocimiento de esta gente que anda tramando a los dueños de perros. Esta gente se va por perros bastante caros, como los pomerania, los terrier y border collie. Son de alto valor. Lo que nos han dicho que hacen es que los ladrones simular estar interesados en comprar el animal, pero cuando llegan al encuentro se los roban", detalló.
Rodríguez explicó que, al tratarse de razas que son fáciles de comercializar, los delincuentes suelen buscarlas. Además, se trata de perros recomendados para familias, son muy enérgicos y juguetones.
"Ese perrito les dura, como mucho, una media hora. Los ponen en alguna página de Internet y rápido los venden al mismo precio del mercado. No es que les bajan el precio, ni mucho menos".
El problema, apuntó Rodríguez, es que estas personas que los han contactado para alertarlos de los robos son de "criaderos ilegales". "Son personas que decidieron vender perros, sin tomar las previsiones del caso, y ahí es donde vienen los problemas. Justo por eso es que nosotros no podemos acompañarlos en el proceso", concluyó Rodríguez.
Por su parte, se intentó obtener la versión del OIJ sobre este tema, pero indicó que, al tener solo una denuncia, no se puede hacer un análisis de la situación.