Un conductor que hablaba por celular mientras manejaba la emprendió a golpes contra un oficial y luego, al resistirse al arresto, cayó al suelo con otro policía, quien se fracturó dos dedos de la mano izquierda.
El incidente se produjo ayer a las 11:10 a. m., 50 metros al sur de la estación de servicio La Primavera, en barrio La California, distrito Catedral de San José.
El chofer involucrado en el hecho, de apellido Gómez y 33 años, fue puesto a la orden de la Fiscalía como sospechoso de agresión a la autoridad y resistencia al arresto, delito castigado, según los artículos 305 y 306 del Código Penal, con una pena que va de uno a cinco años de prisión.
Hecho. Mario Chacón, jefe de la Policía de Tránsito en San José, dijo que el incidente comenzó cuando una pareja de oficiales, Óscar Guzmán y Andrea Segura, detuvieron un automóvil porque el conductor hablaba por celular.
Cuando Guzmán empezó la confección la boleta de infracción, Gómez se alteró y golpeó en el rostro al policía del Tránsito. En ese momento Segura, por medio del radio de comunicación, pidió ayuda cuando dijo: “Le están pegando a un compañero”.
De inmediato otros oficiales que se encontraban en operativos en la avenida segunda y otros sectores de la capital acudieron al sitio donde ocurría el altercado.
Mario Chacón dijo que otro oficial, Wálter Mora, trató de detener a Gómez, pero ambos cayeron al suelo y fue cuando el tráfico se golpeó la mano izquierda, que resultó con fracturas en dos dedos, según la radiografía realizada.
Doris Cuarezma Cuarezma, esposa de Gómez, dijo que su marido nunca opuso resistencia y alegó que más bien fueron los policías del Tránsito quienes golpearon al conductor. “Estoy buscando testigos para presentarlos”, agregó.
Al respecto, Mario Chacón rechazó la acusación pues señaló que todas las personas que estaban en el lugar “observaron lo que pasó y tenemos cuatro testigos”.
Otras sanciones. Paralelamente, al conductor del carro le confeccionaron una boleta por hablar por celular mientras conducía, lo que significa una sanción de ¢270.000. Asimismo, le hicieron otras dos boletas por no contar con extintor ni con triángulos de seguridad. En total, se estima que tendrá que pagar ¢500.000.
Chacón lamentó que dos oficiales no puedan trabajar debido a este hecho.
“Hoy ambos están incapacitados. Uno posiblemente por unos dos meses y al otro hoy le valoran la lesión en un ojo. Eso significa que hay dos oficiales menos para atender incidentes”.