Cae exconvicto por falsa alerta de bomba en oficinas judiciales

OIJ detuvo a sospechoso 10 minutos después de llamar al sistema 911

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Diez minutos bastaron para que el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) detuviera ayer a un exconvicto, luego de que llamara al sistema de emergencia 911, desde un celular, para bromear con que una bomba explotaría en el edificio de los Tribunales de Justicia de Heredia.

La captura ocurrió en San Pablo de Heredia, a solo 100 metros de la vivienda del sospechoso, identificado como Alexander Iglesias Villalobos (34 años).

El detenido había cumplido hasta hace varios meses una condena de 13 años de prisión en la cárcel La Reforma por un robo que cometió en una caseta telefónica de Heredia.

Precisamente, Iglesias había sido sentenciado por un Tribunal Penal en ese mismo edificio, donde tenía acumuladas algunas causas por diversos delitos.

Dos evacuaciones. Una primera falsa alarma, que entró al sistema 911 a las 8:22 a. m., obligó a las autoridades a realizar una evacuación de casi 500 funcionarios del edificio de los Tribunales, suspender los juicios y servicios.

Tras varias revisiones, apoyadas con unidades caninas, se descartó la presencia de explosivos, por lo que los servicios judiciales fueron habilitados tres horas después, cerca de las 11 a. m.

El OIJ informó de que esa llamada fue realizada desde un teléfono público en Desamparados, pero cuando los agentes se desplazaron al sitio, no había personas alrededor.

La segunda alerta también ingresó al 911 a las 3:30 p. m., pero esta vez desde un teléfono celular. Al rastrear la ubicación, las autoridades detectaron que provenía de San Pablo de Heredia y en 10 minutos habían identificado al sospechoso.

La Policía volvió a evacuar el edificio hasta las 4 p. m., cuando el sospechoso confesó que se trataba de una broma.

La Fiscalía procesaría por flagrancia a Iglesias, quien enfrenta una causa penal por el delito de intimidación pública, sancionado con hasta cuatro años de prisión (artículo 275 del Código Penal).

Edwin Retana, fiscal adjunto de Heredia, dijo: “Es muy grave lo ocurrido por la conmoción que crea, por distorsionar el servicio y el alto costo que representa”.