Cuatro sujetos interceptaron a un trailero a la salida de un restaurante de Garabito, Puntarenas, y lo privaron de su libertad para apoderarse de un furgón con ¢230 millones en línea blanca.
De acuerdo con el OIJ, el afectado trasladaba el cargamento desde Golfito. El domingo, pasadas las 5 p. m., el conductor se detuvo en un restaurante de Playa Hermosa.
Los malhechores lo esperaban en las afueras. Conforme su decir, bajo amenaza lo obligaron a conducir hasta Turrúcares de Alajuela.
Allí los asaltantes pegaron la carreta a otro cabezal. La víctima, por su parte, fue abandonada dentro de la cabina del tráiler en las inmediaciones de la Fábrica Nacional de Licores, en Grecia.
El chofer presentaba algunos golpes. Los ladrones lo dejaron atados de pies y manos.
Para las autoridades, resultó llamativo que la versión del afectado es casi igual a la de otro camionero asaltado el 15 de diciembre.
Esa vez el hombre dijo que lo emboscaron a la entrada de Playa Herradura de Garabito y que lo abandonaron, junto con el tráiler, en La Garita de Alajuela.
En esa ocasión, los asaltantes se apoderaron de un cargamento de suéteres para niños, valorado en unos ¢30 millones.
El trailero dijo que lo pasaron a un vehículo y que desde allí pudo escuchar que el tráiler los seguía. Ese ataque fue perpetrado por dos delincuentes.