Un pulpero que dividía sus días entre su negocio y el cuidado de su esposa, quien está enferma de cáncer, murió el martes baleado, al parecer, por un asaltante.
El fallecido fue Aníbal Herrera Torres, de 74 años de edad, propietario del minisúper La Deportiva, ubicado frente a la plaza de deportes de La Trinidad de Moravia, San José.
Ayer, un lazo negro y una fotografía de Herrera colgaban en la entrada de ese comercio. Por la tarde, un grupo de lugareños se reunió en ese sitio para colocar flores como ofrenda al pulpero.
Lucrecia Barrantes, vecina del lugar, relató que Herrera abrió ese negocio desde hace 37 años. “Era como el papá o el abuelo del pueblo, muy querido por todos, por los muchachos, le gustaba ayudar a la gente”, dijo la mujer.
Barrantes también lo recordó como padre ejemplar y un hombre entregado al cuidado de su compañera enferma.
La vecina agregó que Herrera siempre aconsejaba no resistirse a un asalto. Este comerciante era padre de cuatro hijos.
De un balazo. El crimen del pulpero ocurrió a eso de las 7:45 p. m. cuando, según el reporte del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), un hombre ingresó y le pidió el dinero de la caja registradora. Luego le disparó en el cuello.
Juan Carlos Montero, quien trabaja en el abastecedor desde hace 13 años, relató que él escuchó un disparo. “Yo estaba acomodando mercadería atrás, salí y lo vi en el suelo. No había nadie más ahí y antes de eso no escuché nada”, contó el hombre.
“Él era como un padre para mí”, expresó.
Susan Chaves, quien atiende un negocio vecino, también narró que escuchó el disparo. “Salí y vi a alguien correr por la plaza; iba vestido de negro, con un suéter y el gorro puesto”, manifestó.
“Entré y él tenía las manos en el pecho, había plata tirada a sus pies. Yo le decía ‘abuelo’”, contó la joven.
Hasta ayer, la Policía Judicial no tenía a ningún detenido por este homicidio.