Toro desenfrenado mata a su dueño de 85 años

Animal tenía fama de bravo, pero nunca había protagonizado ningún incidente; vecinos recuerdan al fallecido como un hombre trabajador y dadivoso

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Un desafortunado encuentro tuvo un finquero de 85 años con uno de sus toros, luego de que este se saltara una cerca y lo arrastrara cerca de 10 metros.

El suceso se registró este domingo por la noche en Higuito de San Miguel de Desamparados, San José, confirmaron la Cruz Roja y el Organismo de Investigación Judicial (OIJ).

De acuerdo con los datos recolectados por los agentes judiciales, Agustín Jiménez Mora salió a eso de las 6 p. m. a buscar el animal en una de sus fincas, ubicada en calle Rodillal, y casi cinco horas después, a las 11:40 p. m., fue localizado sin vida.

El cuerpo del hombre presentaba varios golpes, por lo que se presume que fue embestido por el bovino.

Durante este lunes, los vecinos lamentaron lo ocurrido y destacaron la humildad que siempre caracterizó al fallecido.

Gerardo Morales, amigo de la víctima desde hace aproximadamente 50 años, contó que el toro involucrado en el hecho era bravo, ya que las personas que pasaban cerca de la finca solían molestarlo y eso lo irritaba.

Destacó que Jiménez lo adquirió hace dos años y que a pesar del temperamento del bovino nunca se había registrado ningún incidente.

“Él subía todos los días por acá, no importaba si llovía o no. Ayer (domingo) lo que pasó es que él (Jiménez) estaba cerca de la cerca, el toro se llevó la cerca y lo arrastró”, afirmó Morales.

En la entrada de la finca, la cual está ubicada entre viviendas, están grabadas las letras AJM, iniciales del nombre y los apellidos del adulto mayor.

Un vehículo y dos sillones se cuelan entre los árboles y a unos metros un tanque oculta a un toro negro que apenas se deja ver.

Ícono de su comunidad

El agradecimiento reinó durante este lunes por la mañana en Higuito de San Miguel, donde don Agustín es todo un ícono.

Gerardo Morales aseguró que la gente lo extrañará mucho, ya que él no se metía con nadie, pero ayudaba a todo aquel que podía.

Recordó que en una ocasión le pidió un dinero prestado y cuando se lo iba a devolver no le cobró intereses y, además, le regaló una parte.

Ambos se conocieron por trabajo, ya que Morales realiza labores de campo y por esto Jiménez lo contactó.

“Cuando él me pedía ayuda yo iba a la finca, tenemos bastante de conocerlo e incluso tuvimos varias anécdotas”, mencionó.

Por su parte, otro vecino que tenía 45 años de conocer a don Agustín, expresó que el fallecido era un ejemplo de superación y que siempre le hizo frente a las labores del campo.

Recalcó su humildad, así como la responsabilidad y seriedad que siempre tuvo ante la vida.

“Fue una persona muy querida, un representante del pueblo y hasta un ícono que ayudó a mucha gente”, afirmó este hombre, quien prefirió mantener su identidad en reserva.

Asimismo, dijo que siempre estará agradecido con don Agustín, quien le ayudó a su madre a reconstruir una casita luego de un incendio ocurrido hace unos 20 años.

Otro vecino, de apellido Mena, destacó que Jiménez era muy conocido por haber vivido toda la vida en esa comunidad y rememoró que cada vez que se veían andaba con botas, un sombrero y un palo.

Percance similar

El 10 de abril del 2015 se registró un hecho similar al de este domingo. Ese día, un toro de unos 500 kilos mató a cornadas a su propietario en una finca en Vázquez de Coronado, San José.

La víctima de ese hecho fue identificada como Nazario Cordero Mora, de 69 años, quien era pensionado del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE).

El cuerpo del hombre tenía cornadas en una axila, el tórax y una pierna.

Para llegar hasta el cuerpo fue necesario lazar al animal, el cual era propiedad de Cordero desde que era un torete.