Turrucares. Un matrimonio peruano y una de sus hijas, de 11 años, murieron ayer luego de que el vehículo en que viajaban colisionó de frente contra un autobús de la ruta de Puntarenas, que se dirigía hacia San José.
El aparatoso choque se registró a las 5:20 p. m., en el cruce a Turrúcares de Alajuela, en el kilómetro 27 de la ruta que conduce hacia Caldera, en el momento en que llovía de manera constante.
Otra hija de 7 años, quien viajaba en el asiento trasero, fue trasladada hasta el Hospital Nacional de Niños (HNN) en San José.
Orlando Urroz, director de ese centro médico, aseguró anoche que la sobreviviente ingresó en condición muy grave al Hospital, por lo que fue remitida al área de Cuidados Intensivos.
“Logró salir adelante por maniobras de resucitación. Llegó con lesiones muy severas y politraumatizada”, aseguró el médico.
Germán Marín, director de la Policía de Tránsito, afirmó anoche que, en apariencia, el accidente ocurrió por una invasión de carril por el carro en que viajaba la pareja , según el testimonio que brindaron algunos pasajeros que iban en el autobús.
Marín Agregó que también analizan un aparente derrape del vehículo, por lo que el conductor habría perdido el control y dio varias vueltas, antes de impactar contra el autobús.
La unidad salió de Puntarenas a las 4 p. m. y viajaba con capacidad máxima de 60 pasajeros, dos de los cuales fueron trasladados al Hospital San Rafael de Alajuela con la intención de valorar los golpes.
De paseo a Guanacaste. El vehículo doble tracción siniestrado pertenecía a Dollar Rent a Car, donde lo fue alquilado horas antes del fatal accidente.
Iván Segura, subgerente de operaciones de Dollar Rent a Car, aseguró que el auto fue alquilado por el conductor el día de ayer. La familia se dirigía hacia playa Tamarindo de Santa Cruz.
Segura prefirió reservarse la identidad del matrimonio por un aspecto legal de la compañía.
El rescatista Henry Cortés dijo que las víctimas quedaron prensadas entre la unidad, por lo que fue necesario utilizar equipo hidráulico para rescatar a la otra niña, la cual presentaba una fractura en su pie derecho.