Gran movilización por emergencia de Boeing

Vuelo de Lacsa con 85 personas

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Dieciocho unidades de Cruz Roja y seis máquinas de bomberos acudieron ayer a la alerta preventiva que se produjo a las 2:28 p.m. en el aeropuerto Juan Santamaría, luego de que se detectara un problema en una llanta de un avión Boeing 737 --matrícula 261LR-- de la compañía Lacsa, que transportaba 79 pasajeros y 6 tripulantes hacia Panamá.

Según el jefe de bomberos de esa terminal aérea, Miguel Vargas, se les informó del desprendimiento de un trozo de caucho de la llanta izquierda del tren principal de aterrizaje, ocurrido, al parecer, tras el despegue.

Aunque no se trataba de un problema de suma gravedad, según Vargas, la movilización se ordenó para prevenir cualquier otra situación durante el aterrizaje. El descenso se logró a las 3:40 p.m. sin ningún contratiempo.

Entre tanto, la policía de tránsito cerró el acceso al aeropuerto para facilitar la salida de los cuerpos de socorro. No obstante, eso no evitó que cientos de curiosos se acomodaran en los sectores noroeste, este y sur de la malla que rodea de la terminal, donde permanecieron hasta que la emergencia concluyó.

90 minutos de tensión

"Nosotros nos enteramos porque la torre nos informó de que había partículas de hule en la pista. Decidimos descender y era mejor quedarnos aquí", narró el piloto Orlando Calvo, de 46 años, quien guiaba la aeronave en compañía de Edwin Herrera.

Durante más de hora y media realizó sobrevuelos por el Santamaría con el fin de disminuir el combustible --despegaron con 22 mil libras en los tanques-- y llegar al peso máximo de aterrizaje; además esto permitió al personal de tierra determinar el daño en la llanta, agregó.

En todo ese tiempo los pasajeros se mantuvieron tranquilos, atendiendo a las indicaciones de la tripulación de cabina. Al bajar, expresó Calvo, todos aplaudieron.

A eso de las 5 p.m. los 79 pasajeros abordaron otro avión, con nuevos tripulantes, que los condujo a Panamá, Caracas --Venezuela-- y San Juan, Puerto Rico.

Según el director de operaciones de la aerolínea, Roberto Escalante, la llanta que presentó el problema "como mucho tenía cuatro días de estar instalada y se cambian semanalmente".

En criterio de Escalante, la cortadura se pudo producir por una piedra o algo similar en la pista; sin embargo, determinarlo será difícil.

El 14 de setiembre de 1995 otro Boeing 737 de Lacsa, sufrió el mismo desperfecto con la gravedad de que en esa ocasión el hule desprendido causó problemas en los estabilizadores. La aeronave llevaba 120 pasajeros hacia Miami.

Ultimas alertas

Estas son las principales alertas que se han dado en el aeropuerto Juan Santamaría en el último año.

27 de febrero, 1995: Un avión de Aero Costa Rica sufrió un desperfecto en su tren de aterrizaje. La nave traía 132 pasajeros.

14 de setiembre, 1995: Por un desprendimiento de un trozo de caucho de una de sus llantas, el avión que hacía el vuelo 620 de Lacsa, con destino a Miami, Estados Unidos, debió regresar a la terminal. Llevaba 120 pasajeros.

16 de setiembre, 1995: un avión de Venezolana Internacional de Aviación (Viasa) quiso abortar su despegue, pero luego levantó vuelo, lo que ocasionó que pegara la cola en la pista. Siempre se elevó, dio vuelta y aterrizó con normalidad.

19 de setiembre, 1995: El vuelo 652 que realizó Aero Costa Rica con un avión alquilado a Lacsa, con 99 pasajeros, tuvo un aterrizaje de emergencia luego de que fallara el tren de aterrizaje.

27 de marzo, 1996: El vuelo 653 de Lacsa debió regresar a la pista cuando se detectó un desprendimiento de caucho en una de sus llantas. 85 pasajeros tuvieron que ser trasladados a otro avión para continuar el viaje.

Fuente: Centro de Documentación de La Nación