El choque de un autobús de la empresa Gafeso con un pickup, la mañana de este sábado, dejó dos pasajeros graves y cinco más con lesiones que ameritaron el traslado a un centro médico.
El accidente ocurrió a las 5:50 a.m. en la comunidad de Volcán de Buenos Aires, en la carretera Interamericana Sur, poco antes del puente sobre el río Cacao.
Las autoridades del Tránsito informaron de que el suceso ocurrió cuando, al parecer, el conductor del pickup invadió el carril contrario. Producto del impacto, el bus con 45 pasajeros se salió de la carretera y y quedó volcado de costado a unos 15 metros de distancia de la carretera, en una finca piñera.
El bus prestaba un servicio regular de pasajeros entre Buenos Aires y San Isidro de El General, cabecera del cantón de Pérez Zeledón, en San José. Transportaba sobre todo trabajadores de empresas piñeras. El vehículo liviano, en cambio, viajaba en el sentido contrario.
Los afectados fueron llevados inicialmente a la clínica de Buenos Aires. Los más delicados, siete, fueron trasladaron al Hospital Escalante Pradilla en San Isidro del General.
La Cruz Roja y el Cuerpo de Bomberos informaron de que la mayoría de pasajeros únicamente presentaban golpes y raspones. Fueron atendidos en el lugar.
El oficial de la Policía de Tránsito, Víctor Picado, quien atendió el percance, identificó al conductor del autobús como Saúl Beita y al del pickup como de apellido Meneses.
Agregó que a los choferes les practicaron la prueba de aliento para determinar si habían consumido licor. La de Beita salió negativa y la de Meneses, positiva, por lo cual este hombre fue puesto a la orden a las autoridades judiciales, que ordenaron llevarlo a un centro médico para determinar el grado de alcohol en sangre.
Según Picado, Beita dijo que el pickup viajaba a gran velocidad y, en determinado momento, invadió el carril contrario.
El pasajero Luis Vargas dijo: "Iba en los primeros asientos de adelante. El bus iba casi lleno cuando sentí que el bus hizo un movimiento raro y escuché un estruendo. Después, solo recuerdo cuando el bus volcó y todo mundo gritaba (...), trataban de salir por donde fuera; aquello era un caos, gritos, llantos, empujones por tratar de salir del bus".
Otra ocupante de la unidad, Jenny Mesén relató: "La verdad pensé que nos íbamos a morir, fueron momentos muy rápidos. Nada más vi cuando el del carro blanco se nos metió y después nos volcamos. Por dicha todos dentro de lo posible estamos bien. Uno que otro golpeado, pero con vida”.