Abuela de niño atropellado por vagoneta: ‘Mi nieto abrió los ojos, volvió a ver a su papá, le sonrió y murió’

Familia asegura que se siente “vacía” desde el sábado, día en el que el camión pesado también dejó mal herido al hermano mayor del pequeño fallecido en Santa María de Dota

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"Mi hijo (Rolando) se levantó el sábado temprano y le dijo a mi nuera que iba a recoger a mi nieto mayor (Isaac, de 4 años), porque se había quedado a dormir donde sus abuelos maternos (en Santa María de Dota). La idea era que, una vez que trajeran a Isaac, se fueran todos a celebrarle el cumpleaños a mi otro nieto (Daniel, de 2 años).

"En eso, mi chiquito (Daniel) se levantó, pero se puso rebelde, no quería ponerse la ropa, no quería ir. Pese a eso, lo pude mudar. En eso, me trajo los zapatos y me dijo que fuéramos. Yo le dije que no, que no podía ir, pero le di ¢10.000 para que fuera a celebrar su día a San Marcos de Tarrazú. Cuando iba saliendo, me dio un beso y me dijo que me amaba. Y se fueron.

"Mi hijo me contó que se fueron para la parada a esperar el bus, cuando él escuchó un ruido y, en fracciones de segundo, tenían la vagoneta encima. A mi hijo lo tiró a media calle, a mi nuera también, a mis dos nietos los prensó.

"Cuando mi hijo se levantó del piso, corrió a ver a sus hijos. Vio a Isaac, pero cuando vio a Daniel sabía que algo estaba mal. A como pudo, lo sacó de entre los restos de la vagoneta y lo que había. Lo cogió en brazos y corrió a la calle, otra vez, para que alguien lo ayudara a llevarlo a la clínica. Un carro se detuvo y se los llevó.

“En el trayecto, mi hijo le iba dando respiración boca a boca para lograr revivirlo. Pero él no reaccionaba. Y, cuando iban llegando a la clínica, Daniel abrió los ojos, volvió a ver a su papá, le sonrió y murió. Ahí mi hijo se deshizo; ahí se nos destrozó la vida a todos”.

Este es el relato de María Ester González, abuela paterna del niño de 2 años que murió luego de ser atropellado por una vagoneta la mañana del sábado pasado en Santa María de Dota, en la zona de Los Santos.

En el accidente, otras cinco personas resultaron heridas, entre las cuales estaba la mamá de Daniel, su hermanito Isaac y el conductor de la vagoneta, de apellido Hidalgo.

El menor de 4 años fue dado de alta este martes, pero debe permanecer las próximas semanas acostado en una cama ortopédica, puesto que tiene sus dos piernas enyesadas. Por su parte, el conductor sigue internado.

Las primeras versiones indican que la vagoneta, que es propiedad de la constructora MECO y que viajaba cargada con piedra, se quedó sin frenos. Por esa falla, colisionó un vehículo estacionado, destruyó las verjas de una casa, invadió la parada de buses y finalmente volcó.

No obstante, todo eso está siendo investigado por las autoridades.

‘Tengo un dolor en el pecho; nos dejó vacíos’

Tres días después, el dolor en el pecho que siente Gerardo Montero, abuelo paterno del niño fallecido, de 58 años, “es indescriptible”.

“No sé si reír, llorar, gritar, callarme. Esto es muy duro y solo uno que lo está pasando, lo entiende, Es un dolor en el pecho; nos dejó vacíos. Nos ha costado muchísimo aceptar la realidad.

“No entiendo cómo mi chiquito se despidió de mí a las 5 a. m. con esa alegría que siempre tenía y, horas después, me llaman para decirme que se me murió. Usted siente que el mundo se le viene encima”, lamentó Montero.

Ese sentimiento lo comparte González, quien insistió en que no entiende nada de lo que está pasando. “Me dejó vacía. En la casa no podemos estar porque él está ahí, toda su vida está ahí. En todos los rincones está él, donde él corría. Ya nada de eso se escucha, todo está en silencio. No podemos asimilar que no está, nosotros lo buscamos en la casa todavía. Estoy deshecha”.

Y, además de sentirse “sin vida”, González también está preocupada, porque hasta el mediodía de este martes, el hermano mayor de Daniel (Isaac), no conocía lo que había ocurrido.

“Isaac lo vio todo, vio todo el accidente. Lo vio casi muerto, aún respiraba, pero lo vio tirado al lado de él. Cuando se levantó en el hospital, no quisimos decirle lo que había pasado. Él nos preguntaba por él, pero no dijimos nada. Isaac cree que su hermanito está en la casa, que ahora que le dieron de alta él va a llegar y lo va a ver. Pero no”, apuntó la abuela paterna.

Lo positivo para esta familia es que cuentan con apoyo de una psicóloga que los va a ayudar a darle la noticia a Isaac. “Y también nos va a decir cómo vamos tratando el tema; todo es tan difícil, es mucho para nosotros. Pero tenemos claro que el que más necesita ayuda es Isaac, porque él lo vio todo”.

‘Si alguien sabe cómo superar esto, que por favor nos lo diga’

Con todo esto que ocurrió, los abuelos paternos no saben bien cómo harán para salir adelante, sobre todo porque se viene la que era la fecha favorita de Daniel: Navidad.

"A mi chiquito le encantaba todo esto. Desde meses antes nos empezó a decir que quería muchos regalos y que lo que más quería era una vagoneta y, bueno, hace unas semanas, me lo lleve para apartarla.

“Escogió la más grande porque me dijo que quería montarse en ella y que yo lo jalara. Ahora, ¿qué voy a hacer con esto y lo otro que le había comprado? Creemos que se los vamos a dar a Isaac para que él lo sienta como un regalo que le hace su hermanito menor, pero cómo duele”, señaló la abuela.

De igual manera, González reconoció que, como aún faltan unas semanas para ese momento, ahora deben enfocarse en “vivir un día a la vez”.

“Ahora estamos medicados, pero quiero que vayamos dejando los medicamentos pronto, porque tenemos que hacerle frente a esto. Así que, si alguien sabe cómo superar esto, que por favor nos lo diga”, imploró la abuela, al tiempo en que aseguró que el mayor consuelo para ellos es recordarlo con la sonrisa con la que siempre andaba, aquella misma sonrisa con la que se despidió de su papá.