Diecisiete personas sufrieron picaduras de abejas la mañana de este domingo, poco antes de iniciar una misa.
El incidente se presentó a las 8:50 a. m., en la parroquia Corpus Christi, en La Aurora de Heredia.
Federico Carballo, jefe de la estación de Bomberos de Heredia explicó que localizaron una colmena en un perling del Gimnasio Municipal de La Aurora, a unos 25 metros del templo.
Carballo precisó que algún ruido fuerte, como podría ser una motoguadaña, las alteró. Esto hizo que las abejas atacaran a las personas que estaban en los alrededores de la iglesia.
José Antonio Ramírez , cruzrojista de San Joaquín de Flores, explicó que entre 25 y 30 personas fueron atacadas por los insectos.
Sin embargo, solamente 17 afectados requirieron ser trasladados al Hospital San Vicente de Paúl, en Heredia. Entre las personas que fueron llevadas al centro médico, estaban dos hombres mayores apellidados Morera, de 88 años, y Rojas, de 72, así como dos mujeres de apellidos, Brenes, de 72 y Aguilar, de 80.
También requirieron atención cuatro menores de edad y nueve personas más entre 40 y 60 años. “Cuando se atendió la emergencia, el enjambre iba por media calle y atacó a personas que tenían escasos minutos de haber salido de la misa y a los que iban entrando a la otra misa que ya iba a iniciar”, agregó Ramírez.
El cruzrojista relató que las abejas se pegaron en las vitrinas del templo católico.
“Uno de los sacerdotes de apellido Espinoza fue picado, él es alérgico y se sentía mareado, por lo que se procedió con el traslado al hospital”, dijo Ramírez.
El jefe de Bomberos dijo que también uno de los bomberos, identificado como Pablo Herrera fue picado por las abejas, pero fue atendido en el sitio.
Según estadísticas de Bomberos, en el primer trimestre de este año atendieron 5.178 llamadas por ataques de abejas. Esto un 6% más que en el mismo periodo del año pasado (4.899).
Rescate. Al tiempo que cruzrojistas en seis unidades atendieron a los afectados, miembros del Cuerpo de Bomberos se encargaron de exterminar los insectos.
“Cuando llegamos al lugar vimos gran cantidad de gente corriendo con abejas sobre sus cabezas. La reacción del sacerdote fue meterlos a todos dentro de la capilla”, comentó Carballo.
El bombero explicó que inicialmente se encargaron de aislar la zona en un perímetro de unos 300 metros cuadrados.
Posteriormente, trabajaron en el exterminio de la colmena que, según los bomberos, estaba formada por una mezcla de abejas conocidas como mieleras con africanizadas.
“Dichosamente tuvimos la asistencia del personal del mismo templo quienes con sus vehículos ayudaron con el traslado de los afectados. Ellos sacaron a las personas para que fueron atendidas por las unidades de Cruz Roja, que estaban a los 300 metros de la iglesia”, dijo el jefe de Bomberos.
“Nosotros con tres carros particulares, evacuamos a la gente a un lugar seguro y luego ayudamos a trasladar a los pacientes”, relató Guillermo Barquero, asistente administrativo de la parroquia Corpus Christi.