4 absueltos por duda en caso de homicidio en hospital

Fiscalía cree que testigos cambiaron su versión por temor tras amenazas

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

El Tribunal de Juicio de Limón absolvió ayer, por duda y por actividad procesal defectuosa, a un grupo que la Fiscalía había vinculado con el homicidio del paciente Henry Clark Hines, de 26 años, ocurrido el 10 de mayo del 2007 en el Hospital Tony Facio.

Tres de los imputados, de apellidos Forbes, López y Brooks, fueron absueltos de un delito de homicidio calificado y de portación de armas por el principio de in dubio pro reo (en caso de duda, se beneficia al imputado).

Una mujer, de apellido Ocampo, fue absuelta de los delitos de coacción y de favorecimiento personal pues la declaración de una testigo en anticipo jurisdiccional fue considerada ineficaz.

Tatiana Vargas, vocera de la Fiscalía, señaló: “Hubo un debilitamiento en el debate porque los testigos variaron su versión. Existe la posibilidad de que haya sido a raíz de amenazas”.

Homicidio. El juicio a esas cuatro personas se inició el 16 de mayo por el homicidio de Clark, quien estaba internado en el Hospital Tony Facio, de Limón, por haber recibido varios balazos. Luego lo mataron en el mismo centro médico.

La acusación indicó que los sujetos entraron al hospital a las 3:35 a. m., por la oficina de recepción, retuvieron a vigilantes y a una enfermera, y luego balearon al paciente cuando estaba en su cama.

Culpables. La Fiscalía también acusó a los tres hombres (López, Forbes y Brooks) de matar días después a Emilio Abarca Arias, de 22 años, el 11 de julio del 2007, en el barrio Cieneguita de Limón.

El Tribunal los declaró culpables y los sentenció a 35 años de prisión cada uno por el delito de homicidio calificado, y a seis meses de cárcel por otro delito: portación ilegal de arma.

Abarca recibió seis balazos y dos puñaladas en un callejón de Cieneguita.

La Policía determinó en ese momento que el sospechoso salió de su casa por solicitud de un amigo, quien le pidió reunirse para conversar en ese lugar. Allí, López, Forbes y Brooks lo esperaron para atacarlo por sorpresa.

El Tribunal prorrogó la prisión preventiva por seis meses a los tres sentenciados.

El edificio de los Tribunales de Limón estuvo fuertemente custodiado desde el inicio del debate, el 16 de mayo, por varios agentes de la Unidad de Intervención Policial y de la Fuerza Pública.