Consumir ácido fólico durante el embarazo reduce malformaciones congénitas

Las mujeres que antes y durante el embarazo consumen ácido fólico pueden prevenir malformaciones congénitas y mejorar la respuesta del organismo ante ciertas enfermedades.

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Las mujeres que antes y durante el embarazo consumen ácido fólico pueden prevenir malformaciones congénitas y mejorar la respuesta del organismo ante ciertas enfermedades.

Esta vitamina, que ayuda al organismo a crear células nuevas, tiene la capacidad de prevenir afectaciones del tubo neutral durante el crecimiento del bebé, como la espina bífida -malformación de la columna vertebral caracterizada por la ausencia de la soldadura entre dos mitades de uno o varios arcos vertebrales posteriores-. Estas lesiones pueden ser incapacitantes o potencialmente mortales para el bebé.

Además, esta vitamina del grupo B (Vitamina B9) beneficia a hombres y mujeres de cualquier edad, protege las células sanas, previene un tipo de anemia, contribuye a controlar la hipertensión, interviene en la formación del sistema nervioso, es beneficioso para el tratamiento de los síntomas asociados a la menopausia, reduce las probabilidades de padecer cáncer de colon, cáncer de cuello uterino y, en algunos casos, cáncer de seno. El ácido fólico proveniente de los alimentos, se absorbe en el intestino delgado y es distribuido por la sangre a los tejidos.

Esencial en el embarazo

Todas las personas necesitan esta vitamina, pero las mujeres en edad fértil o que las están embarazadas requieren una cantidad extra. Para que haga efecto es necesario consumirlo todos los días de acuerdo con las indicaciones de los profesionales en ciencias médicas.

Según un estudio de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), las malformaciones congénitas en Costa Rica tuvieron una caída considerable desde que se inició la fortificación de alimentos con ácido fólico (en productos como el arroz, la harina y la leche).

María de la Paz Barboza y Lilia María Umaña Solís, médicas a cargo del estudio, determinaron que la prevalencia de defectos en el tubo neural bajaron de 12 por cada 10 mil habitantes en 1997, a 5 por cada 10 mil personas en el 2012.

Pese a la importancia de la suplementación de ácido fólico, Esteban Vega de la O (miembro de la coordinación institucional de Servicios Farmacéuticos de la CCSS), dijo que, el año pasado, unos 20 mil pacientes no retiraron la vitamina de las farmacias.