Addyi: La píldora rosada que promete subir su apetito sexual

Hasta ahora, un trastorno llamado desorden de deseo sexual hipoactivo, o anorexia sexual, era tratado solo con terapia psicológica o hierbas naturales. A partir de ahora, las mujeres pueden contar con Addyi, una pastilla rosada que busca tratar ese mal. La llegada a Costa Rica todavía no tiene fecha.

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Una de cada 10 mujeres lo sufre: su deseo sexual, si alguna vez existió, se desvaneció, y la idea de la intimidad no la seduce en lo más mínimo. Tiene relaciones para complacer a su pareja, pero la experiencia no es placentera y puede ser dolorosa.

Ellas sufren un trastorno llamado desorden de deseo sexual hipoactivo, o anorexia sexual. Hasta este martes, tal padecimiento solo era tratado con terapia psicológica o hierbas naturales. Pero a partir de ahora, estas mujeres pueden contar con Addyi, una pastilla rosada que busca tratar ese mal. La Agencia de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) aprobó este fármaco desarrollado por el laboratorio farmacéutico Sprout.

"Son mujeres que están bien en su relación de pareja, no tienen problemas psicológicos pero, por algún motivo, no les motiva la vida sexual y más bien la rechazan", explicó Janet Woodcock, directora del Centro de Investigación y Evaluación de la FDA.

¿Qué es? La píldora rosada no debería ser llamada "Viagra femenina", porque son distintas. En el caso del Viagra, el principio activo se llama sildenafil y opera directamente sobre el pene para lograr una erección. No puede afirmarse totalmente que actúe sobre el deseo sexual.

Incluso, la farmacéutica Pfizer, creadora del Viagra (para hombres), detuvo los ensayos clínicos en mujeres porque el producto afectaba la salud de las participantes.

Por el contrario, la mal llamada "Viagra femenina" trabaja sobre el deseo sexual por la vía bioquímica. Para lograrlo, utiliza un principio activo llamado flibanserina, que actúa sobre el cerebro de la mujer.

La flibanserina es un estimulador de los receptores 5-HT1A y un bloqueador de los 5-HT2A. Esto significa que, en teoría, el fármaco equilibra en el cerebro sustancias que inhiben el deseo sexual, como la serotonina, al tiempo que promueve la dopamina y la norepinefrina, que lo estimulan.

Por sus habilidades para influir en el sistema nervioso central, la flibanserina fue estudiada inicialmente contra la depresión por la compañía Boehringer Ingelheim. Los estudios se extendieron hasta 2010, cuando la FDA la rechazó por primera vez como medicación para favorecer el deseo sexual femenino.

Después, el laboratorio Sprout Pharmaceuticals continuó con las investigaciones.

Un reporte publicado en el 2013 en la revista Journal of Sexual Medicine halló que las mujeres que tomaban Addyi reportaron un aumento promedio de 2,5 eventos sexuales satisfactorios en cuatro semanas, en comparación con un aumento de 1,5 en las mujeres que tomaron placebo.

Eso sí, existen efectos secundarios, como dolor de cabeza, somnolencia, disminución de la tensión arterial e incluso pérdida del conocimiento. También se debe cuidar la interacción con otros medicamentos y se recomienda su uso en mayores de 18 años, con pareja estable y solo antes de la menopausia.

Por esto, Addyi –que se comercializará en Estados Unidos a partir del 17 de octubre– solo se venderá con receta médica en farmacias autorizadas.

La llegada a Costa Rica todavía no tiene fecha. Una vez que alguien se muestre interesado por distribuirlo en el país, la oficina de Registros y Controles del Ministerio de Salud debe estudiar el caso para darle un registro y un permiso de distribución.

Eso puede llevarse meses, pero el hecho de que el fármaco ya esté aprobado en EE. UU. aligera los trámites.