Selección Nacional se dio un baño de masas

Plantel compartió y se divirtió con niños de una escuela de un barrio marginal

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Santos, Brasil. La Selección Nacional de Costa Rica se olvidó ayer por la tarde de Italia, de Inglaterra; de sorpresas y gestas.

Los futbolistas ticos se alejaron por un par de horas de la pizarra y de la cancha para convivir con una centena de niños de la escuela pública Padre Lúcio Floro, en el barrio marginal Morro de José Menino, en la ciudad de Santos. La asesora de prensa de la alcaldía, Kamila Malynoskyj, lo definió como una favela.

Tuvieron que viajar en tres microbuses, dado que la empinada cuesta hacia el lugar y la angosta calle no permitía que el bus oficial de FIFA hiciera el transporte.

Luego debieron superar a cientos de habitantes de la zona que abarrotaron la entrada de la institución para obtener una fotografía, una camiseta o una firma en el popular álbum de Panini.

Y cuando finalmente lograron entrar causaron locura entre los jóvenes alumnos de entre tres y nueve años, quienes aunque seguramente no los conocían, entendieron que la visita era algo especial.

Los jugadores repartieron fotografías del equipo y algunas camisetas a los infantes; empero, hasta miembros del profesorado aprovecharon para tener su contacto. Muchos también con el mencionado álbum en la mano.

Los niños, parte de una escuela completamente subvencionada por el municipio, les devolvieron el gesto con una canción, a la cual los ticos reaccionaron con sonrisas y muchos aplausos.

Formalidad. La parte formal incluyó palabras del alcalde santista, Paulo Alexandre Barbosa, del técnico Jorge Luis Pinto y del mediocampista Celso Borges, en un muy fluido portugués, más allá de que dijera que no lo maneja bien.

Se lanzaron agradecimientos y buenos deseos: Barbosa dijo que ojalá Costa Rica llegara muy largo y tanto Pinto como Borges manifestaron que se acostumbraran a ellos pues durarán toda la Copa.

La jornada se cerró con una comparsa y una bailarina de samba, que luego terminó acompañada por casi todo el plantel. Quien quebró el hielo fue Christian Bolaños, a petición de sus compañeros.

Esta fue la primera de tres actividades sociales que se planificaron entre la Alcaldía de Santos, ciudad sede de la Tricolor , y la Federación Costarricense de Fútbol para sacar a los jugadores de la rutina que da una concentración, según la planificación compartida por el director de selecciones, Ricardo Chacón.

Hoy será la segunda, con un almuerzo privado, tipo rodízio , con personalidades de la ciudad y el sábado 21 irán a un centro recreativo llamado Club Inglés, donde recibirán clases de samba.