Kingston. La esperanza es lo último que se abandona, pero hasta eso podría perder Jamaica si no gana mañana ante Costa Rica.
Por eso y por el deshonor que sería ver a los ticos celebrar la clasificación mundialista en su patio es que este es un partido especial para el equipo caribeño.
La llegada del entrenador alemán Winfried Schäfer introdujo un empuje de ánimo al grupo. Incluso conquistaron un resultado, el empate en Panamá, que en otras condiciones hubiera sido positivo.
Mas puede que ya sea muy tarde. A tres jornadas de que termine la Hexagonal, Jamaica es último lugar, con tres puntos, y está a cinco unidades de México, que ostenta el cuarto puesto que da el boleto al repechaje contra Nueva Zelanda.
Amparados en ese “no hay mañana” es que los Reggae Boyz trabajaron ayer domingo.
Del rival, Costa Rica, solo saben que es primero en la tabla. No esconden que al único que conocen, a medias, es a Bryan Ruiz, volante del Fulham inglés.
“La verdad no conocemos mucho de Costa Rica, nos estamos enfocando en nuestro equipo y lo que podemos hacer”, comentó el defensor Wes Morgan.
Varios cambios. La llegada de Schäfer a Jamaica, el 17 de julio, significó muchos cambios en las convocatorias del equipo. Así como un distinto estilo de juego, mucho más táctico y ordenado.
Para mañana habrán aún más de esos cambios, incluso en relación al partido contra Panamá, el único que ha dirigido el alemán.
Contra la Tricolor los caribeños sufrirán una falta sensible pues Rodolph Austin, del Leeds United, salió expulsado el viernes.
Sí contarán con el defensor Adrian Mariappa, quien la semana pasada fichó con el Crystal Palace de la Premier League y crea mucha expectativa en su selección.
Ayer Schäfer no quiso dar muchas pistas de la alineación. Apenas aseguró los campos de Mariappa, Morgan y Jermaine Taylor, defensor del Dymano de la MLS.
“Primero quiero ver el video de Costa Rica y decidir qué vamos a plantear”, comentó el D. T.
Sin embargo, ni el entrenador sabe qué hacer para solventar el problema del ataque. Con solo dos goles anotados los Reggae Boyz son la peor ofensiva de la Hexagonal.
“Nosotros no tenemos a un Messi y ocupamos encontrar las alternativas ante la carencia de este jugador y cambiar nuestra estrategia”, agregó el estratega alemán.
Apatía en las calles. Muy pocos jamaiquinos se dan por enterados de que la selección de su país se jugará la vida el martes. A los pocos que lo saben tampoco parece interesarles demasiado.
En Kingston otros intereses van por delante del fútbol. Deportes como el criquet y, en especial, el atletismo están más arraigados.
La venta de entradas ha sido lenta, para el viernes no se habían vendido ni 5.000 boletos.
Incluso desde el jueves la Federación inició una promoción en la que bajó el precio de los boletos más baratos. Pasaron de 1.500 dólares jamaiquinos (casi ¢7.500) a 1.000 (unos ¢5.000), pero solo accesibles en tres puntos de venta.