Ni el mismo ganador del Balón de Oro mostró agrado al recibir un agasajo que premió a un jugador de poco ver en las canchas de Brasil.
El argentino Lionel Messi le puede sumar el premio del Balón de Oro del Mundial a sus cuatro galardones consecutivos (2009-2012) de Balón de Oro a mejor futbolista del orbe. No así la Copa del Mundo, lo que seguirá como el anhelo en una carrera en la que en clubes lo ha conseguido absolutamente todo.
Pero los estadios de Brasil se quedaron con las ganas de ver el mejor talento que la Pulga ha exhibido en casi una década de carrera con el Barcelona de España.
De ahí lo polémico de una decisión que premió a un futbolista de mediocre rendimiento, cuyos cuatro goles fueron marcados en una fácil fase de grupos y que poco ayudó a la Albiceleste en las semifinales o en la gran final.
“A estas alturas ya sabemos que del momento de Messi no se puede esperar una gran actuación, sino una gran jugada”, decía el icono argentino Jorge Valdano en la previa del duelo decisivo.
No se equivocó. Mas esa gran jugada no llegó para el lamento de todo el pueblo argentino. En las gargantas se quedaron esos cánticos de que Messi llevaría la Copa directo del Maracaná a Buenos Aires.
En cambio, esos mismos estadios brasileños sí vieron desfilar la clase del colombiano James Rodríguez (goleador del certamen en solo cinco partidos de acción), la calidad infaltable del campeón alemán Thomas Müller (Balón de Plata) y las imparables corridas del símbolo holandés Arjen Roben (Balón de Bronce). Y así sigue la lista de quienes hicieron más mérito que el mediático Messi.
Siempre polémico. De la votación para el Balón de Oro se sabe, o se supone, que la efectúan selectos periodistas, pero poco se sabe de quienes son o cuándo lo hacen.
Quizá para la FIFA sea funcional que la polémica rodee al premio. Quizá es imposible que todo el mundo se ponga de acuerdo respecto a quien fue el mejor jugador del certamen.
Lo cierto es que nunca ha faltado discusión alrededor de este polémico tema y las escogencias.
En el 2002 se criticó que un portero, el alemán y subcampeón Oliver Kahn, recibiera el premio por encima de un Ronaldo de récord.
En el 2006 Zinedine Zidane fue premiado pese al fatal cabezazo de la final que prácticamente le costó a Francia el campeonato.
De hecho, solo tres veces el Balón de Oro fue para un campeón: Paolo Rossi (Italia, en 1982), Diego Maradona (Argentina, en 1986) y Romario (Brasil, en 1994).