Lo que debió ser una fiesta con aroma de Mundial terminó siendo un juego más de preparación para la Tricolor .
La mayoría de aficionados no atendieron al clamor de los jugadores y a la invitación del propio estratega de la Selección, Jorge Luis Pinto, para que llenaran el Estadio Nacional de La Sabana.
Según información de la encargada de prensa de la Fedefútbol, Gina Escobar, apenas 12.500 boletos de los 30.000 aproximadamente que se pusieron a la venta logró vender la Federación Costarricense de Fútbol para el duelo ante el combinado de Paraguay.
A esos 12.500 aficionados que acudieron pagando su boleto hay que sumarle unos 4.000 de invitados especiales y patrocinadores.
El ambiente se percibía frío desde semanas atrás y la polémica que generó el nuevo uniforme terminó por afectar la afluencia de aficionados.
Eso sí, los que acudieron al juego calentaron por momentos el partido con cánticos y apoyo, principalmente en los primeros minutos del trámite del partido.
Cornetas, gritos de apoyo y un par de comparsas rompieron el hielo que se lograba sentir en las gradas del reducto de La Sabana.
Poco premio. Al cierre de esta nota ningún federativo dio a conocer el monto de la taquilla de anoche.
Y es que el dinero de recaudación se destinaría por partes iguales a los seleccionados a modo de premio por la clasificación al Mundial de Brasil, monto líquido que quedó tras los rebajos de costos operativos del juego como seguridad privada y alquiler del estadio, entre otros.
Fue así como la Tricolor se despidió de la afición costarricense en suelo tico, antes de partir a Denver, Estados Unidos, el próximo 20 de mayo para comenzar el campamento previo a la cita mundialista.
La consigna de la Federación Costarricense de Fútbol era conseguir un fogueo para abril, pero las negociaciones con el posible rival, Honduras, no prosperaron, por lo que esto fue todo para la Selección Nacional en el país.