Italia se concentra en cómo ganarle a Costa Rica

El arquero Gianluigi Buffon y el defensa Mattia De Sciglio aún no se han recuperado y siguen como dudas para el duelo contra los ticos

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Manaos, Brasil

Italia no puede darse el lujo de celebrar demasiado después de comenzar la Copa del Mundo con un triunfo sobre Inglaterra y aún no recupera completamente a el arquero Gianluigi Buffon y el defensa Mattia De Sciglio.

Los Azzurri tienen que recuperarse físicamente después de un cotejo desgastante en la ciudad amazónica de Manaos. Ahora, se preparan para toparse con la sorprendente Costa Rica.

El portero Gianluii Buffon y el defensa Mattia De Sciglio siguen el plan de recuperación de sus distintas lesiones y su participación ante los ticos, en el segundo choque del Grupo D, está en el aire.

Ambos se perdieron ya el encuentro del sábado contra Inglaterra, que Italia venció por 2-1 en Manaos.

El médico del combinado italiano, Enrico Castellacci, no aseguró la participación de ninguno ante el combinado costarricense. "No puedo dar aún un pronóstico preciso de su evolución y si podrán estar. Va a depender del día a día la posibilidad de que jueguen o no" , indicó el galeno.

Buffon sufrió una lesión en el tobillo y rodilla izquierda en la sesión de entrenamiento previa al partido ante Inglaterra. De Sciglio padece una lesión muscular.

El médico italiano es más optimista en la evolución de la lesión de Buffon. "Espero una recuperación rápida", mientras que De Sciglio aún no puede entrenar.

Ambos se perdieron el debut mundialista de Italia. Salvatore Sirigu ocupó la meta y Giorgio Chiellini fue el reemplazo de De Sciglio.

Asimismo, los italianos deberán revertir su tendencia de jugar mal contra equipos más débiles en el papel, y de sufrir en el segundo encuentro de los mundiales.

"El segundo partido es decisivo", dijo el técnico Cesare Prandelli después de la victoria por 2-1 sobre los ingleses, el sábado.

La selección italiana viajó el domingo de vuelta a su base de entrenamiento en Mangaratiba. Sin embargo, deberá volver de nuevo al norte para el partido del viernes, en Recife contra Costa Rica, que remontó para doblegar 3-1 a Uruguay.

Ese resultado hizo que la acción del apretado Grupo D comenzara con una sorpresa mayúscula.

"Miré los primeros partidos de esta Copa del Mundo y no hay equipos débiles", dijo el delantero italiano Mario Balotelli, quien anotó el tanto del triunfo frente a Inglaterra. "Ellos están bien organizados, pero no tememos a nadie. Son los otros equipos los que deben temer a Italia".

Sobre si esta selección puede llegar a la final, como lo hizo en la Eurocopa de 2012, Balotelli respondió, "me concentro sólo en Costa Rica. No podemos precipitarnos y pensar en otra cosa porque no llegamos a nada".

Costa Rica e Italia comparten la punta del Grupo D, con tres unidades. Los Azzurri llegan al próximo duelo como claros favoritos.

Sin embargo, desbordaban confianza también en la Euro de 2012, cuando igualaron 1-1 con la campeona España. En el segundo partido sufrieron y apenas empataron 1-1 ante Croacia, por lo que requirieron de imponerse 2-0 a Irlanda para avanzar.

Incluso en 2006, cuando Italia ganó su cuarta Copa del Mundo, abrió con un triunfo por 2-0 sobre Ghana pero empató 1-1 ante Estados Unidos en su siguiente partido. De nuevo, se metieron en problemas antes de avanzar a la segunda ronda.

Y en 2010, las cosas fueron de mal en peor entre el primer compromiso y el segundo. Tras un empate 1-1 frente a Paraguay, los Azzurri fueron limitados a una vergonzosa igualada 1-1 ante Nueva Zelanda, antes de quedar eliminados por Eslovaquia, que se impuso por 3-2.

Para complicar el asunto está el factor del clima. De acuerdo con la FIFA, la temperatura fue de 30 grados centígrados (86 Fahrenheit) , con una humedad de 61% durante el cotejo ante Inglaterra.

Prandelli criticó a los organizadores, por no permitir pausas para la hidratación. "Fue un duelo épico", dijo Prandelli. "Un partido que recordaremos por el resto de nuestras vidas". Pero ahora, Italia no quiere recordarlo. Prefiere concentrarse en los ticos, para que no ocurra un batacazo aún mayor en el Mundial.