San José (Redacción). El objetivo es el primer lugar, evadir a Honduras. Con esa mentalidad salieron las selecciones de Estados Unidos y Costa Rica a su tercer partido del grupo C de la Copa de Oro, que se realiza en en el estadio Rentschler Field en Connecticut.
El recinto está lleno de estadounidenses pero una minoría de aficionados provoca que en los primeros minutos se oiga el “¡Ticos! ¡Ticos!” en todas la graderías.
Costa Rica inició con el control del balón pero aún no ha logrado marcar.
El ganador del encuentro enfrentará a El Salvador, una selección con mayores facilidades que los catrachos.
Este encuentro sirve como una especie de revancha al duelo anterior entre ambos por las eliminatorias, que los estadounidenses ganaron 1-0 en un terreno nevado en Denver.
El técnico de Costa Rica, Jorge Luis Pinto, descartó que esto sea una “venganza”, sino solo un duelo por el primer lugar del grupo.
“Todos recordamos lo de Denver y sabemos que es importante tenerlo en cuenta, pero solo tenmos que pensar en la victoria (...) lo que paso en el pasado debe quedar en el pasado”, manifestó Pinto