Hartford, Connecticut. Belice y Cuba se jugarán hoy, en el estadio Rentschler Field de esta ciudad, su último chance de clasificarse a cuartos de final de la Copa de Oro.
Es una posibilidad remota para ambos (quien gane tiene hacerlo por cuatro goles o más), pero se niegan a pensar en una despedida del torneo regional.
A partir de las 5:30 p. m. (3:30 p. m., hora de Costa Rica) ambas selecciones quemarán su último cartucho en este certamen, en busca de una victoria que les permita pasar a la siguiente ronda como mejor tercer lugar.
Tanto los beliceños contra los cubanos perdieron sus dos primeros encuentros (ante Estados Unidos y Costa Rica) y acumulan un gol diferencia de -6.
“Creo que no hemos estado generando las suficientes jugadas para anotar, eso nos tiene ansiosos, pero confiamos en poder derrotar a Cuba”, afirmó el delantero beliceño Deon McCauley.
En el cuartel isleño, el veterano guardameta Odelín Molina podría jugar mañana el último partido de su carrera, si Cuba pasa a cuartos.
“Es difícil, me causa dolor saber mi retiro está a la vuelta de la esquina”, dijo entre lágrimas.