Álvaro Saborío le dijo adiós al sueño mundialista

Una fractura en el quinto metatarsiano del pie derecho lo sacó de Brasil 2014

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

San Rafael de Alajuela. Con crueldad, Álvaro Saborío se despidió del Mundial .

Una fractura en el quinto metatarsiano de su pie derecho le arrancó de golpe el sueño de estar en una nueva cita planetaria, de poder anotar el gol que se debe a sí mismo, de tomarse una revancha añorada ante Uruguay.

No fue un choque, no fue una barrida malintencionada. Fue un inofensivo pique cerca del área en búsqueda de la pelota, justo como lo hizo un millón de veces. Pero en esta ocasión algo salió mal. La tracción le jugó en contra.

No fue posible hablar con sus compañeros sobre la acción; no obstante, miembros de la Federación Costarricense de Fútbol , entre ellos el médico de la Selección , periodistas y dirigentes que presenciaban la práctica matutina de la Tricolor en la cancha natural del Proyecto Gol, contaron que inclusive hubo un fuerte sonido cuando el hueso cedió.

Y Saborío cayó al piso con el amargo destino definido. Lo sabía él y lo sabían el resto de jugadores. Los kilómetros de cancha les amplían la intuición en estos temas. No estaría en la lista de 23; no estaría en el avión que partirá a Brasil el 9 de junio con la ilusión de 4,5 millones de costarricenses.

Entonces, hubo camilla, hubo lágrimas, hubo abrazos por parte del resto del plantel, uno que está aliado como pocas veces.

Lo más doloroso es que el delantero tiene gran cuota en eso.

Con sus 32 años, un Mundial encima y mucha experiencia internacional es uno de los líderes del camerino de la Tricolor.

Fue vital en el giro de 180° que se le dio a la eliminatoria en la cuadrangular semifinal, cuando todo iba directo al caño.

Después de una derrota ante México, convocó a los demás y los instó a cambiar el rumbo, tocando sensibles hebras como la de que esta sería su última posibilidad de regresar a un Mundial.

Pero ahora no estará. Deberá concentrarse en las próximas semanas en recuperarse de una lesión que si bien no es grave, precisa mucho cuidado. Más si quiere intentar cuanto antes el retorno a lo que él mismo describió el lunes como “uno de los mejores momentos de su carrera”.

Proceder. Según explicó ayer el ortopedista Vladimir Badilla en conferencia de prensa existen dos vías: la invasiva y más rápida, y la conservadora y más lenta.

La primera incluye una cirugía y la necesidad de pines; la segunda una inmovilización.

Será decisión del Real Salt Lake y del propio jugador el camino a elegir. De todas maneras un regreso, en el mejor de los casos, no será antes de mes y medio.

Sin embargo, por ahora su ruta es desconocida. Ayer, se fue del Proyecto Gol sin decir palabra, pero visiblemente afectado.