Tampa, Florida. El técnico de la selección de Japón, Alberto Zaccheroni, se mostró sonriente y cordial ayer en la conferencia de prensa que brindó en Clearwater, Tampa, Florida.
Su buen ánimo concuerda con el ambiente que vive la selección nipona previo al juego de esta noche ante Costa Rica.
Ayer hasta hubo tiempo para que el alcalde de Clearwater, George Cretekos, le entregara las llaves de la ciudad al estratega de nacionalidad italiana.
“Ya tiene una segunda casa y es aquí, en Clearwater, en Tampa”, dijo sonriente Cretekos.
Pero el señorío de Zaccheroni nunca quedó de lado y su semblante serio regresó en la primer pregunta de la conferencia, cuando le tocó hablar de lo que le gusta, de fútbol.
“Nosotros tenemos varios objetivos para este encuentro (contra Costa Rica), queremos ver las condiciones de los jugadores, eso es lo primero, pero además el resultado es importante para lo que pueda suceder en la Copa del Mundo, queremos que tengan confianza”, expresó Zaccheroni.
El seleccionador japonés espera que la Tricolor sea exigente.
“Será un partido importante porque Costa Rica es de los mejores del Centroamérica. Sobre el equipo, pienso que es muy bueno, que ha hecho cosas muy importantes como estar cinco o cuatro puntos encima de México en la eliminatoria, eso dice mucho. Tiene buenos jugadores en Europa que lo han hecho bien”, agregó el italiano.
De lo que sí está seguro el experimentado estratega es que ante la Tricolor plantará a su equipo estelar mundialista, con la consigna de ganar rodaje.
Las principales figuras de los nipones, principalmente en ataque, son Keisuke Honda, que militan en el AC Milán, así como el habilidoso delantero Shinji Kagawa, del Manchester United de Inglaterra y a quien el propio Jorge Luis Pinto le pone atención.