Luis Marín, asistente de la Selección Mayor, asegura que Costa Rica quedó en el grupo de la muerte por la calidad de rivales con los que se medirá en la cuadrangular camino a Rusia 2018.
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La Tricolor es la cabeza del bloque B donde comparte con Panamá y los ganadores de las series entre Nicaragua-Haití y Jamaica-Nicaragua.
En charla con La Nación, el asistente de Paulo Wanchope calificó de dura la ruta que le espera a la Tricolor en su intención de llegar a la cita mundalista.
"Nuestro grupo es el de la Muerte por la conformación de nuestro bloque y comparándolo con los demás. Jamaica tendrá que luchar por su puesto, lo mismo que Haití, de modo que sí ellos llegan, será un grupo muy parejo y difícil para todos", afirmó.
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"Para nosotros ellos serán rivales complicados pero también nosotros lo seremos para ellos", subrayó.
Para el excapitán de la Sele, a través de la historia, las eliminatorias nunca han sido accesibles para Costa Rica, de ahí que no vislumbra un camino llano hacia la Copa del Mundo Rusia 2018.
"No hay rival pequeño, Haití ha crecido muchísimo, Jamaica es un rival complicadísimo, la mayoría de sus jugadores están en ligas europeas. No es algo que nos asuste o nos sorprenda pues ya sabíamos como están evolucionando".
Según Marín, "en el fútbol moderno todos se preparan, estudian a los rivales y las diferencias abismales quedaron en el pasado. Por eso hay que tomarlo como que la eliminatoria siempre será difícil sea quien sea el rival".
Por último, indicó que será determinanente la preparación que tenga Costa Rica en los próximos meses pues la eliminatoria comenzará el 7 de noviembre.
"Aquí el tema es mentalizarnos y prepararnos bien, comprometernos todos y que el país apoye como siempre lo hace en este tipo de instancias".
Previo al comienzo de la ruta mundialista, de momento la Tricolor tiene un fogueo amarrado frente a Uruguay, el 8 de setiembre en el Estadio Nacional.