La calma del aeropuerto Juan Santamaría se vio interrumpida una vez más por la llegada de Keylor Navas al país.
Apenas se supo que la presencia de los medios de comunicación en la terminal aérea obedecía a que venía el arquero, los ticos comenzaron a conglomerarse en la salida principal.
No importó que durara más de la cuenta, debido al extravío de unas maletas. Con una hora de retraso, Navas cruzó la puerta y provocó una verdadera locura entre quienes aguardaban para verlo, para pedirle una foto o un autógrafo.
Se creía en principio que llegaría en silencio, pero sin tensiones y por voluntad propia, el tico que juega en el Real Madrid se detuvo y atendió algunas consultas de la prensa.
"Bien, bien, contento, siempre venir a la Selección me motiva mucho", apuntó Navas, quien será el portero titular de la Tricolor en el arranque de la hexagonal final rumbo al Mundial de Rusia 2018.
Costa Rica visita este viernes a Trinidad y Tobago, a las 5 p. m. (hora naciona) y el próximo martes recibirá a Estados Unidos en el Estadio Nacional.
Navas viene con ritmo, ha jugado cinco partidos de la Liga española y tres en Champions, más el fogueo de la Selección en Rusia.
Es decir, llega con confianza, luego de que se operó por un problema en el talón de Aquiles. "Al estar lesionado siempre cuesta un poco regresar, pero estoy muy feliz y ahora me siento sin dolor, sin nada y eso es lo que uno quiere como futbolista, ser feliz", comentó Navas.
Keylor no venía solo, con él también arribaron Joel Campbell y Bryan Ruiz.
Los tres futbolistas se integran este mismo lunes a la Selección Nacional.
La algarabía era tal que a Navas le costó marcharse, aunque la presencia de Joel y de Bryan le sirvió para escabullirse entre la multitud.