Una vez más se suma otro fracaso en la Federación Costarricense de Fútbol. Nuevamente Costa Rica se queda sin asistir a un Mundial de categoría menor.
De los últimos 11 mundiales, solo se ha asistido a tres y la última eliminación, el domingo en categoría Sub-17 frente a Puerto Rico, es toda una pena.
Puerto Rico no existe a nivel futbolístico, nunca ha jugado ni en una Copa Oro, menos un Mundial. En la Copa del Caribe solo una vez clasificó desde 1989 y no pasó de la fase de grupos.
A nivel menor no tiene mayor registro que estar a un juego de asistir al Mundial de Perú Sub-17 a finales de este año, luego de eliminar a Costa Rica.
Que una selección menor quede eliminada de un mundial, peccata minuta, dirán algunos, de todas formas ya estamos acostumbrados y seguro nos saldrán con el cuento de siempre: las distancias se acortaron, a esta selección se le dio todo, hasta un par de fogueos en Europa. Por eso se contrató a Claudio Vivas, director de selecciones.
Pero entre todo lo lamentable, es preguntar, a quién en la Federación Costarricense de Fútbol se le ocurrió contratar para la Selección Sub-17, a un entrenador que tiene algún tiempo de no dirigir menores.
Esto lo dijo el propio Erick Rodríguez, técnico de la Tricolor.
“Tenía algún tiempo de no dirigir chicos”, dijo el entrenador Erick Rodríguez.
Gustavo Jiménez, del departamento de prensa de la Fedefútbol, envió a los medios de comunicación una entrevista con Rodríguez, luego del fracaso frente a Puerto Rico y en un momento, Jiménez le pregunta a Rodríguez: “¿Usted personalmente cómo vivió esta experiencia, un proceso de este tipo?”.
“Es una experiencia bonita la verdad, tenía algún tiempo de no dirigir chicos”, contestó Erick.
Entonces algo no calza, se eligió a alguien que no dudo, tiene conocimiento, estudios y experiencia en Primera División, pero que ha laborado poco o casi nada con jóvenes menores de 17 años; al menos eso se desprende de sus propias palabras.
Además Rodríguez mencionó que los muchachos llegaron con falencias al torneo, entonces para qué los llevó si les observó errores, o algo les faltaba. Entonces no escogió bien, no tuvo ojo para observar el talento o quizá ese tiempo de “no dirigir chicos”, le pasó una gran factura.
Para rematar, Erick Rodríguez señaló: “Lo que queda es hacer un análisis, como siempre lo trillado. Ver el tema del biotipo, ver el tema de los perfiles de los jugadores”, pero Erick, eso debió verlo antes de ir a disputar uno de los cuatro cupos para el Mundial.
Haber asistido a solo tres mundiales menores de los últimos 11 que se han efectuado, no debe verse como algo trillado.