La detección de un diurético en una muestra tomada en la pasada Vuelta a Guatemala dejó en jaque la carrera de Enrique Artavia, suspendido desde ayer por su equipo, el Coopenae-Movistar-Economy .
El ciclista costarricense fue notificado el pasado lunes por la UCI tras arrojar positivo con hidroclorotiazida, un conocido diurético catalogado por la Agencia Mundial Antidopaje como restringido pero no necesariamente prohibido.
Por esa razón la UCI, según reveló el propio equipo, no exigió la suspensión del corredor, pero la medida fue adoptada por el conjunto como parte de su protocolo en situaciones de este tipo.
“Él (Artavia) podría seguir perfectamente compitiendo pues no hay nada que lo prohiba, pero nosotros, por una cuestión de precaución y de reglamento, decidimos suspenderlo hasta que se aclare todo esto”, aseguró ayer Daniel Muñiz, gerente deportivo del club.
Tanto Muñiz como el propio Artavia defendieron que la sustancia como tal no produce ningún efecto en el rendimiento de un ciclista sino que más bien a veces lo afecta por la pérdida de líquidos, una versión que posteriormente respaldó el experto en dopaje Félix Murillo.
Misterio. En los deportes, la presencia de un diurético en cualquier atleta casi siempre se liga al dopaje pues precisamente estos ayudan a “enmascarar” otras sustancias prohibidas como esteroides.
Sin embargo, en la notificación de la UCI se detalla que de inmediato se realizó una contramuestra en busca de algún rastro de otro elemento dopante y esta dio negativa.
Esa situación es la que hace difícil de explicar la aparición del diurético en el organismo de Artavia, quien reconoció que no tiene idea de cómo o por qué estaba ahí.
“Estamos en una investigación porque no sabemos por qué apareció. Yo tengo un tratamiento para la colitis... pero bueno, esto está muy reciente, puede ser que haya algún tipo de contaminación con comida o no sé, son hipótesis.
”La verdad estoy demasiado sorprendido, era algo que no me esperaba. Más bien recuerdo el día que me tocó ir al control y oriné con la mayor rapidez porque no tenía ninguna preocupación con ese tema”, aseguró Artavia ayer.
Daniel Muñiz agregó que no solicitarán la contramuestra y que más bien ese dinero lo utilizarán para preparar la defensa ante la UCI, ante la cual tanto el ciclista como su equipo intentarán explicar las razones sobre ese positivo en el control, de lo contrario se verán expuestos a una posterior sanción.
En 2011 el ruso Alexandr Kolobnev debió abandonar el Tour de Francia tras dar positivo con hidroclorotiazida; sin embargo, eludió la suspensión al demostrar que sufría de una enfermedad vascular.