Thousand Oaks, California (AP). Tiger Woods afirmó que nunca aprendió más en un año, en el que también dejó de ganar más.
Woods dijo que está más en paz con su vida personal que cuando regreso al golf en abril, y que mantiene la esperanza de que no terminará la temporada sin una victoria.
“Aprendí mucho de mí, y aprendí cuánto salieron mal las cosas, por qué salieron mal, y tuve que hacer una muy profunda e introspectiva mirada de mí mismo. Y no hubo muchas cosas que me gustaran”, admitió Woods en una conferencia de prensa por vídeo desde la sede del torneo Chevron World Challenge.
“Pero tuve que hacerlo, lo hice y estoy agradecido de hacerlo”.
El Chevron World Challenge, a jugarse del 3 al 6 de diciembre en Sherwood Country Club, será su último torneo del año. La escala más cercana de Woods es el 4 de noviembre en Shanghái para el HSBC Champions, su oportunidad final de ganar una competencia oficial en la Gira de la PGA. Luego se dirige a Melbourne para defender su título en el Masters de Australia antes de cerrar el año en Sherwood.
Woods se ausentó cuatro meses del golf para tomar un curso de rehabilitación luego de problemas de infidelidad. Entonces, regresó al Masters. Empató en el cuarto lugar en el Augusta National y tuvo la misma posición en el U.S. Open.
Se divorció el 23 de agosto de Elin Nordegren. Woods dijo que sus dos hijos se están adaptando a su nueva vida.
“Creo que todos están ciertamente más en paz, y así estoy”, aseguró Woods.