Podríamos decir que el ciclismo como manera de recrearse o hacer deporte vive su apogeo en Costa Rica. Algunos dirán que es solo moda y pasará, pero lo cierto es que cada vez más personas buscan bicicletas, por eso es importante saber cuál comprar.
En esta nota nos centramos en los principiantes, aquellas personas que por primera vez buscarán un bici, ya sea para ciclismo de ruta o montaña.
Con ayuda de José Adrián Bonilla describimos los aspectos básicos en los que debería fijarse un aprendiz.
La primera gran pregunta.
¿Cuánto dinero necesito?
Como todo en la vida, es algo difícil de responder. Hay mucha variedad, aunque en este momento los ciclos están con más demanda que oferta.
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Sin embargo, vamos a poner un rango de entre ₡300.000 y ₡500.000, aunque se puede encontrar algo menor o mayor y dependerá de las marcas. Esos precios pueden ser para bicicletas de gama baja o intermedia.
El primer consejo de Bonilla es: compre algo que también le brinde seguridad.
“Si comprás algo demasiado básico y eventualmente querés hacer recorridos más exigentes, probablemente no te vaya a aguantar”.
Entonces, busque la bicicleta acorde a cuánto o para qué la va a utilizar. Si solo es para dar algunas vueltas, hacer un mandado o salir por el barrio, será diferente a si su intención es hacer recorridos extensos o utilizarla varias veces para salir a entrenar.
Teniendo eso claro, es importante la talla. Pasa y mucho, asegura Bonilla, que las personas compran sin asesorarse y después aparecen los dolores de espaldas, hombros, cintura, etc.
¿Y cómo sé cuál es mi talla?
Esto varía según la marca. La opción más certera es realizarse un bike fitting, que básicamente es la medición del cuerpo bajo parámetros de biomecánica para un ajuste perfecto entre ambos.
Tiendas de ciclismo suelen vender este servicio, pero si se sale del presupuesto hay otras opciones.
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"Lo mínimo es buscar una tienda en la que los asesoren bien. Ojalá que los asesores de ventas tengan algún tipo de certificación en este tema", menciona Champu. Eso tomando en cuenta que la comprará en un lugar especializado, si lo hace en un supermercado o cualquier otro lugar sin enfoque en ciclismo, pues se reducen las posibilidades.
Otro caso muy común es comprar la bicicleta de segunda, a otra persona.
"Ahí lo importante es averiguar antes cuál es la talla. La mayoría de marcas, por no decir todas, tienen en sus páginas web un estimado. Con la altura de la persona se conoce el rango de talla que debería usar". Después se pueden hacer ajustes.
¿Se mide diferente si es de ruta o montaña?
"Si sos L en tu bici de ruta, probablemente serás L en la bici de montaña. Eso ya sería por gusto. Hay gente que usa diferentes tallas en ruta o montaña".
¿Qué hace a una bici ganar valor?
Esta duda es fundamental, pues cuando una persona tiene varias opciones, decidirse por una u otra puede ser un dolor de cabeza. No todo está en el color.
Bonilla asegura que muchas veces la diferencia de gamas está en los componentes. Puede tratarse del mismo marco, pero componentes muy distintos entre la básica e intermedia.
"Yo en las cosas que invertiría para tratar de mejorar una bici sería en los frenos, aros, la transmisión, pasadores y la cadena, porque al final es lo que sufre más desgaste y eventualmente hay que cambiarlo".
Asegura que la suspensión hace una gran diferencia, pero no tiene sentido gastar mucho dinero en eso si la bicicleta es sencilla.
Enfoquémonos en los principales.
-Frenos: Para ir a la segura lo mejor es comprar bicis que vengan armadas con componentes de marcas reconocidas. Las más populares son Shimano y Sram.
-Aros: hay de diferentes tamaños, muchas opciones y combinaciones. La recomendación: que sean de 29 pulgadas (lo más popular en montaña) o de 27 y medio.
-Transmisiones: estándar, y eso, recomienda José Adrián, es utilizar un plato y 12 velocidades (piñón) en montaña, mientras en ruta lo común son dos platos y 11 velocidades.
¿Cómo explicaría esa relación al momento de pedalear, tomando como ejemplo la de 1x12?
“Eso lo que significa es que en la parte delantera, donde están los pedales, solamente va a tener una opción, que es el plato, y atrás va a tener doce diferentes piñones. Están pensados para que dependiendo del terreno, se puede tener un rango de marchas para afrontar subidas con piñón más grande o bajadas y planos con piñón más pequeño. Dependiendo del nivel es variar el tamaño del plato. En bicicletas de montaña, los élite utilizan platos de 32 o 34, la gente aficionada o principiantes platos de 28 y 30″.
¿Marco de aluminio o de carbono?
Si es por precio, las de carbono serán más costosas. Pero eso no quiere decir que las de aluminio sean una mala idea.
"Hay marcas que últimamente han sacado bicis de aluminio de gamas intermedias que son muy competitivas a la par de una bici de carbono.
Si alguien está iniciando y no sabe si le va a gustar el ciclismo, le diría que compre de aluminio y después puede cambiar accesorios y eventualmente hacer un paso hacia una gama más alta".
¿Pedales “comunes” o de clip?
Esta respuesta es definitiva: "Ese es uno de los accesorios que más problemas da cuando la gente está empezando", afirma Bonilla.
Entonces, la recomendación es simple: Comience con pedales de plataforma y tenis y luego, con el tiempo, puede pasar al clip.
El secreto está en practicar el gesto de quitar y poner el clip con el apoyo de una pared.