Emanuel Villalobos no podía ver solo la contrarreloj individual de este domingo en el Giro de Italia y por eso fue a la casa de los papás de Andrey Amador, en Cartago.
Ahí estuvo con don Rodolfo y doña Raisa; así como con Iván, el hermano de Andrey.
Más conocido como Chacarrón, el mejor amigo de Andrey asegura que estaba nervioso y emocionado a la vez.
"Estábamos súper nerviosos, por ratos hablábamos, por ratos nos quedábamos callados, esperando hasta el último que llegara para ver en qué posición terminaba y al final es una alegría y todos quedamos con los ojos empañados en lágrimas", afirmó Villalobos.
Apuntó que lo principal era que Amador no sufriera ningún contratiempo, debido a la lluvia y al peligro de esos 40,5 kilómetros.
"Yo creo que uno analiza la general para ver qué pronóstico se puede sacar y siempre decíamos que estaba dentro del top 5 para la general y hablando con Andrey el sábado nos decía que teníamos que estar pendientes de la carrera, de la crono, porque tenía buenas sensaciones y de hecho fue así".
Chacarrón se siente muy orgulloso de ver que su compinche está otra vez de tercero en la general del Giro de Italia, algo que no alcanza cualquier ciclista.
"Yo creo que al final es la carrera a la que sabe llegar bien en forma, tuve la oportunidad de entrenar con él en varios días y hablábamos de eso, que al final tenía esa espina de meterse entre los tres primeros y lo va logrando", contó.
Aún faltan doce fracciones, pero el mejor amigo de Andrey está convencido de que llegarán más alegrías.
"Faltan las etapas que vienen, que son las más duras del Giro y esperamos tenerlo ahí, siempre arriba. Ya pasamos un día de sustos, hubo muchas caídas en la curva del final y por dicha no lo presentaron cuando él pasó por ahí, porque estábamos sufriendo, pidiendo que no le pasara nada en esa curva, pero la cortó bien, le supo entrar y al final el resultado", finalizó Chacarrón.