Las Vegas, EE. UU. (AFP). El invicto Floyd Mayweather regresa al ring después de un año de ausencia, que incluyó una temporada en la cárcel, para enfrentar el sábado al zurdo estadounidense Robert 'Fantasma' Guerrero, poniendo en riesgo su título de peso welter del Consejo Mundial de Boxeo (CMB).
Mayweather, invicto en 43 peleas, 26 de ellas ganadas por nocáuts, fue a la cárcel en junio pasado por violencia doméstica, un periodo al que él llamo de "vacaciones".
Desde su liberación hace ocho meses ha estado trabajando para recuperar la condición física necesaria que le permita a sus 36 años defender su lugar al frente de la lista de ingresos en el boxeo profesional.
"Me siento invencible. Estoy en las mejores condiciones. Estoy en gran forma. He estado trabajando duro", aseguró Mayweather.
"Sólo llamo a ésto (la cárcel) unas vacaciones. A veces, el cuerpo necesita tiempo para sanar. El cuerpo necesita tiempo para rejuvenecer. El cuerpo necesita tiempo para descansar", añadió.
Pero su compatriota Fantasma Guerrero (récord de 31-1 con 18 kos) le puede salir respondón y darle un buen susto, pues viene de una racha de 15 triunfos consecutivos desde el 2005.
Guerrero, seis años más joven que Mayweather, ve esta oportunidad como "un regalo del cielo" para su carrera, y para humillar a Mayweather e infligirle la primera derrota de su carrera.
"No sólo voy a humillar a Floyd, sino también al mundo del boxeo", dijo Guerrero de su misión, la noche del sábado en el hotel-casino MGM Grand de Las Vegas (Nevada).
"Alguna gente piensa que Floyd es un Dios por la forma en que vive, la forma en que se gasta el dinero. Algunas personas piensan que es imbatible. Nada de eso es cierto. Yo le voy a propinar su primera derrota".
El Fantasma, y su padre y entrenador Rubén Guerrero, matizaron con todo tipo de insulto a Mayweather, tratando de sacarlo de sus casillas, pero el otrora Niño Lindo de Las Vegas, devenido ahora exitoso empresario, aguantó el aguacero con una sonrisa imperturbable.
"Por ese año de descanso, tienes un cinturón (mundial) con óxido. Va a tomar un poco de tiempo quitarle la herrumbre", añadió Guerrero. En tanto, su padre acusó a Mayweather de "golpeador y abusador de mujeres", y le retó a darse una trompadas encima el escenario.
"No tengo por qué pelear con su padre, que es un hombre viejo que sólo quiere lucirse frente a las cámaras", indicó Mayweather.
"Si eso hubiera sucedido antes, el problema hubiera sido grande, quién sabe qué hubiera pasado, pero he aprendido mucho en estos últimos meses", dijo. "Tengo una familia que cuidar; mi hijo el mayor ya tiene 18 años y tengo que darle un buen ejemplo, en mi vida profesional y personal".
Guerrero, que viene de una decisión de 12 asaltos sobre André Berto en noviembre pasado, sabe que más allá de las palabras y amenazas Mayweather es un boxeador formidable, con óxido o no, y lo reconoce.
"Floyd es un peleador muy inteligente y un hombre muy fuerte. Espero que venga dispuesto a pelearél estuviera dispuesto a ir", dijo Guerrero.
Esta será la primera de las seis peleas que firmó Mayweather con la cadena Showtime, por unos 200 millones de dólares, tras abandonar el soporte de toda sus carrera que significó HBO.
Mayweather, que creó su propia empresa promotora de boxeo, se ha visto más involucrado que nunca en la promoción de la cartelera de pague por ver, que incluye además el pleito bautizado "Fiesta del Cinco de Mayo" entre el invicto retador mexicano Abner Mares (25-0 con un empate y 13 kos) y el campeón peso pluma del CMB Daniel Ponce de León (44-4 con 35 kos).