Mary Laura Meza: ‘Me habían quitado la beca; era como que Londres ya no’

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Desde Austria, donde cursa el primero año de Administración de Empresas en la Universidad de Graz, la nadadora criolla expresó que se sintió contrariada cuando el Comité Olímpico Nacional le quitó la beca, pues por otro lado la Federación de Natación le buscaba un cupo de invitación ( wild card ) para las Olimpiadas. Pese a esto, la especialista en los 100 metros mariposa, quien competirá el 28 de julio, dijo que está fuerte y que irá a emular su mejor tiempo, pues ve difícil pasar de ronda.

¿Cuándo le avisaron que iba a competir en las Olimpiadas?

Fue en la segunda semana de junio.

¿Antes de que le dieran la noticia, usted se preparaba?

En realidad don Wualter (Soto, presidente de la Federación de Natación) me había avisado desde abril que estaba trabajando para ver si se lograba conseguir la invitación, que el Comité Olímpico Nacional aceptara y que la Comisión Técnica de la Fecona aceptara.

¿Pero en realidad usted no se venía preparando para esto?

Desde antes no porque me habían quitado la beca y eso era como que me estaban diciendo que Londres ya no. Además, yo tenía una lesión en los hombros.

¿Qué ha hecho en este mes y medio de trabajo?

La preparación de Londres no empezó cuando me dijeron que sí (iba a los Olímpicos). Desde hace cuatro años, cuando empezó el ciclo olímpico, me estaba preparando para Londres. No es como que no estoy llegando preparada. No solo cuenta el último año; cuenta todo el ciclo olímpico y todos los años que he practicado la natación.

¿Cómo ha sido el trabajo?

En las primeras tres semanas empecé a trabajar más pesas, pues aún había tiempo para eso. Fue preparación al máximo esfuerzo, mientras que en el agua buscaba ser más veloz en los últimos 50 metros. En la última semana simplemente me enfoqué en cómo se siente el agua, en mejorar la técnica y en llegar lo más relajada posible.

¿Cuál es su mejor tiempo?

Es 1:03:47. Lo hice en los Juegos Centroamericanos y del Caribe, que fueron en Puerto Rico (2010).

¿Cuánto es el tiempo que hacen los que están en la élite mundial de los 100 metros mariposa?

Para llegar a la semifinal hay que estar abajo del minuto.

¿Puede llegar a eso?

No, en realidad si hay bastante diferencia con (respecto a) mi mejor tiempo y no puedo llegar a hacer eso en tan poco tiempo.

¿Entonces es aquí donde sí se resiente el que le hayan avisado con tan poco tiempo?

Hay que ser realista. No es de la noche a la mañana que uno se salta cuatro o cinco segundos; es un proceso bastante largo. No sabría decirle cuánto tiempo se necesita. La mayoría de nadadores de Europa y Estados Unidos tienen condiciones para entrenar desde que nacieron. Eso es bastante diferente a lo que uno tiene en Costa Rica.

Me dice que le quitaron la beca (del Comité Olímpico). ¿Por qué?

Es una respuesta que ni yo le puedo responder.

¿No preguntó?

Sí, pero dieron la excusa de que querían dar el chance de poder sanarme de mis hombros y que necesitaban darle la plata a otra persona que en ese momento tenía la marca olímpica, aunque no fuera en natación.

¿Se sintió mal?

Me la habían dado a principios del año pasado. Cuando me la quitaron, prácticamente tuve que encontrar trabajo para quedarme.

¿Usted usaba esa beca para vivir en Austria?

Sí y para pagarme la academia de natación. Mi mamá (Roxanie Peraza) no tiene cómo cubrir todo, como las competencias y todo lo que yo necesito.

¿Parece que hay falta de coordinación porque por un lado le quitan la beca y por otro buscan la forma de que vaya a los Olímpicos?

Se podría decir. Después me devolvieron la beca, no la misma, sino la de preparación para los Juegos Centroamericanos San José 2013. Es una beca de $1.000 (mismo monto de la beca olímpica).

¿Cuáles son sus perspectivas reales en las Olimpiadas?

Poder hacer el 1:03:47 que no logro desde hace dos años. Cada centésima cuenta.

Existen personas que cuestionan el que vaya a las Olimpiadas y luego diga que fue por mejorar su marca. ¿Qué piensa de eso?

En realidad les diría que se metan a un deporte y que traten de llegar al nivel que estamos; que tomen en cuenta que Olimpiadas no es solo ir a ganar medalla, sino también ir y representar al país con lo mejor que uno tiene. Es el estar ahí.

¿En algún momento pensó en decir que no iba a Londres?

En realidad no. Cuando empecé a nadar, me di cuenta que el hombro estaba sano. Eso era una ganancia bastante grande. Sé de lo que soy capaz. Quiero lograr mi mejor tiempo de hace dos años (1:03:47) y alcanzar la forma que tenía antes.

¿En este proceso, cuánto le afectó el fallecimiento de su padre (Gilberto Meza)?

Él murió el 1.º de diciembre del 2010 y realmente el año pasado fue una baja completa de mi natación y de muchos otros aspectos de mi vida. Él era el que más me había apoyado. Era como ajustarse a una nueva etapa de la vida.

¿Qué le falta para cerrar la preparación hacia Londres?

Lo único es relajarme lo más posible; sacar los nervios. Si me pongo nerviosa, mi cuerpo es como una piedra. Todo lo que he hecho no va servir de nada.

¿Sus sensaciones en el agua son buenas?

La verdad es que me siento bastante bien; me siento fuerte. Mi técnica ha mejorado bastante en cuatro meses que tengo de haber cambiado de entrenador. Es como si la motivación haya venido de nuevo.

¿Le ayuda nadar en Austria?

Sí, es un salto muy grande. Le abre a uno los ojos. Acá se ve cómo trabajan las potencias.