Las medallas ticas en Managua tienen un aire juvenil y de esperanza

La mayoría de atletas nacionales que ha sumado preseas en disciplinas individuales, no pasan de los 22 años

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Managua, Nicaragua. Algunas no tienen edad para votar, conducir un automóvil y aún viven con sus padres, pero tiene la responsabilidad de representar a todo un país en los Juegos Centroamericanos de Managua 2017.

De las seis medallas que oro que se ha ganado nuestro país en las justas del área, cinco son de la natación y de ellas cuatro fueron ganadas por nadadoras menores de 21 años.

Helena Moreno con 16 años ganó preseas doradas en 400 y 1.500 libre; Beatriz Padrón, con 14 años, se dejó el primer lugar en los 50 metros pecho; mientras que Daniela Alfaro fue la mejor en los 200 metros combinado, con 15 años.

A ellas se une Adriana Morera, quien se quedó con la presea dorada en los 100 metros pecho y apenas cuenta con 21 años, en las que son sus segundas justas.

La presea dorada corresponde al esgrimista Bradley Johnston, quien fue el primero en subirse a lo más alto del podio al ganar la competencia de espada. Él tiene 28 años.

Pero la historia no termina allí pues, además, las esgrimistas Daniela Jurado y Karina Dyner y se dejaron las medallas de plata y bronce el miércoles en la modalidad de espada. Ellas cuentan con 21 y 15 años respectivamente.

En el plano individual tampoco se puede dejar pasar a las hermanas Virginia y Victoria Rodríguez, quienes con 17 y 19 años se llevaron para su natal Palmares seis medallas de plata en la halterofilia, al competir en las categorías de 63 y 69 kilogramos, mientras su compañera de equipo Isabel Montero, quien se dejó una plata y dos bronces, tiene 22 años.

Con su corta edad como principal carta de presentación y los logros alcanzados a nivel centroamericano, estos jóvenes atletas no solo piden apoyo económico para seguir creciendo, de parte de los entes estatales, sino además continuar con el proceso que los lleve a competencias de mayor exigencia para conocer sus limitaciones y dónde deben mejorar.

Si a ellos les suman jóvenes como Juan Diego Castro, de 17 años, quien competirá en los 800 y 1.500 metros en el atletismo, y Leilani McGonagle, en el surf, quien apenas este año cumplió 18 años, es claro la juventud y el futuro son el norte de la delegación de Costa Rica para los próximos años.

Daniela Alfaro, estudiante del Colegio Samuel Saénz, comentó que para ella sus estudios y la natación son lo más importante y de allí que ni importa lo que tenga que hacer, siempre lo da todo, a pesar de que algunas veces debe desayunar en el carro cuando se desplaza de los entrenamientos al colegio.

“A mí me encanta pasear, ir a la playa, al cine, pero este deporte es muy sacrificado, por lo que yo prefiero mil vences entrenar que salir con mis amigos. Estos triunfos son más importantes, por eso es que yo lucho, no salgo, para mí es lo más importante que tengo, porque es un privilegio representar al país”, comentó Alfaro, quien empezó en la natación desde los cinco años.

La joven ingresó a esta disciplina por apoyo de su madre, y asegura que se lleva muy bien con su compañera Beatriz Padrón, más aún al tener una edad muy similar.

Me alegra que Beatriz y yo podamos disfrutar de un triunfo como este, es increíble y emocionante que en nuestros primeros Juegos Centroamericanos ganemos medalla de oro y la verdad me siento feliz. Nosotras nos queremos demasiado, pasamos en una pura “pega” ella es súper linda, súper bella gente y se esfuerza mucho al igual que nosotros.

La otra chiquilla de la natación es Beatriz Padrón, quien aseguró que se ha tenido que esforzar en lo académico y en los entrenamientos para ver los resultados.

“Tengo que aplicarme mucho en el colegio porque la natación no me va a dar de comer, no es algo a lo que me voya dedicar toda mi vida, así que tengo que esforzarme en el colegio y la natación para ver los resultados, me he perdido algunos lujos que tienenlos adolescentes, como ir a fiestas con mi compañeros, pero no me arrepiento porque me dedico a algo que me gusta,”, aseguró Padrón.

La oriunda de Belén y estudiante del colegio Saint Paul aprendió a nadar a pedido de su mamá para evitar algún accidente, pero ella aseguró que siempre se sintió atraída por el agua y se lleva muy bien con Daniela Alfaro.

“Daniela es demasiado pega, es súper amiga mía. Hemos ido como a tres torneos este año y siempre nos estamos riendo. Es una gran ayuda tener a una compañera de una misma edad con la que uno se puede relacionar muy fácilmente. Quiero terminar estos Centroamericanos con los mejores resultados y, a largo plazo, sueño con llegar a una olimpiada como todo atleta”, admitió Padrón.

Otra de las jovencitas del equipo de Costa Rica es Karina Dyner, quien con 15 años ganó el bronce en el esgrima, en espada, al perder la semifinal contra la panameña Alexandra Aicardi, quien posteriormente le ganó la final a la también tica Daniela Jurado.

“Uno está muy feliz por darle una medalla al país y demostramos que el equipo femenino de espada está muy bien. Hemos subido mucho con este entrenador. La mayoría del equipo es muy joven y llegamos al podio, lo cual demuestra que se puede, no importar la edad, siempre cuando se tenga un proceso de trabajo y manteniendo ese ritmo de entrenamiento uno puede lograr grandes cosas trabajando duro y obtener resultados sin tener tantas experiencias o fogueos”, dijo Dyner.

La joven indicó que la edad no debe ser un impedimento para que un atleta obtenga resultados y pueda lograr triunfos parael país.

“Se nota que la siguiente generación de atletas está avanzando en el deporte, razón para que las entidades se fijen que se deben tener los entrenadores y procesos porque los jóvenes que no tenemos tanto tiempo en el deporte o que no llevan tanto tiempo también pueden sacar medallas con los entrenadores buenos, así como con el apoyo multidisciplinario del Comité Olímpico”, agregó Dyner.

Por su parte, Daniela Jurado se quedó con la plata en al modalidad de espada, pero considera que pueden mejorar más y obtener mejores resultados en el futuro.

“Es un orgullo haber ganado una medalla para Costa Rica, duele que no sea de oro, porque todas hemos trabajado mucho. Queríamos otro resultado,pero bueno solo queda seguir trabajando. Estamos clasificados a los Juegos Centroamericanos y del Caribe en Barranquilla, Colombia 2018 y esperamos ir a sacar una medalla allá”, indicó Jurado.

La esgrimista se muestra feliz con los resultados del equipo y confesó que el trabajo que desarrolló el entrenador austríaco Jerzy Konczalski fue fundamental para el buen desempeño del equipo y ante la juventud del gupo necesitan apoyo para seguir creciendo.

“Sin el apoyo no somos nada. Podemos entrenar todo lo que querramos, pero sin apoyo no somos nada. En esgrima necesitamos competir y se necesita experiencia y en nombre de todos los atletas deseamos que cambiela situación en Costa Rica y queremos que se den cuenta que estamos sacando medallas y necesitamos el apoyo para los jóvenes y seguir con los buenos resultados”, sentenció Jurado.