Juliana ‘China’ Rodríguez se inspiró en lucha de su madre contra cáncer de mama

Ana Ruth Acevedo, madre de la campeona mundial Oro de las 118 libras, de la Asociación Mundial de Boxeo, es ejemplo de lucha y determinación

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Aquella pequeña niña de seis años apenas comprendía lo que sufría su mamá, quien luchaba contra una enfermedad que la tenía en cama, le producía vómitos y hasta había perdido su cabello.

Juliana Rodríguez y su hermana Angely Karina Rodríguez, a pesar de estar pequeñas, se ofrecían a hacer la comida para que su madre Ana Ruth Acevedo descansara, se quedara en cama y pudiera soportar la complicada quimioterapia, tras ser diagnosticada con cáncer de mama.

No darse por vencida, ser positiva ante la adversidad y luchar hasta alcanzar su objetivo fueron algunas de las cualidades que caracterizaron a Ana Ruth y que le ayudaron a superar la enfermedad y ser testigo de cómo su hija menor, la China, se proclamó este jueves campeona mundial Oro de las 118 libras de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) al derrotar a la pananeña Sayda Msquera.

“Como es normal en las personas que tienen cáncer, tenía mis días buenos y mis días malos. Me descomponía con facilidad y mi hija mayor era la que cuidaba a Juliana. Nosotras tres vivíamos solitas, en Calle Fallas de Desamparados. Desde entonces mis niñas demostraron mucha disciplina, la cual fue fundamental en su formación”, recordó Acevedo.

Ana Ruth Acevedo muestra orgullosa el cinturón de su hija, Juliana ‘China’ Rodríguez, quien este jueves se coronó campeona mundial Oro de las 118 libras de la Asociación Mundial de Boxeo. Fotografía: Juan Diego Villarreal

“A mí me diagnosticaron cáncer en 2004 y con los tratamientos y la quimio empecé a mejorar en el 2008, cuando me creció el ‘pelito’. Un año después (cinco en total) fue cuando me sentí mejor y el doctor me dijo que las personas se mueren de cáncer por la depresión, pero la ventaja fue que yo estaba muy positiva y precisamente fue por mi actitud que pude sobrevivir”, agregó.

Con un ramo de flores en sus brazos y el orgullo de ver a su pequeña Juliana con el cinturón de campeona, Ana Ruth resalta la perseverancia de su hija, la misma que tuvo ella para superar la enfermedad y salir adelante, aunque los pronósticos no eran los mejores.

“Mis hijas son unas guerreras. Pese a las dificultades que pasamos, ellas lograron salir adelante con disciplina y esfuerzo. Mi hija mayor es enfermera y trabaja en Alemania, mientras Juliana está muy cerca de terminar su carrera de Terapia Física y alcanzó uno de sus grandes objetivos deportivos, a pesar de todo lo que hemos afrontado”, explicó Acevedo.

Ana Ruth Acevedo, quien es profesora de Español en el Liceo de Calle Fallas de Desamparados, recuerda que desde pequeña a la China le atraían deportes que practicaban más los hombres. Pasó de jugar fútbol, del cual se aburrió, a practicar boxeo.

No obstante, ella como madre siempre la apoyó para que alcanzara sus sueños y no se viera perjudicada por pensamientos machistas.

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“A Juli desde niña le encantaba jugar carritos, luego más grande el fútbol y finalmente el boxeo. Siempre la incentivamos a practicar deporte, le dimos esa seguridad. Nunca les impuse nada, como educadora las dejaba escoger, les daba esa libertad de disfrutar de la disciplina que más le gustaba”, admitió Acevedo.

Peligro latente

Aunque es la seguidora número uno de su hija y la más incondicional, Ana Ruth no puede ocultar su zozobra cada vez que Juliana sube al cuadrilátero. Ella se pone nerviosa y ruega a Dios que no le pase nada malo.

“Obviamente uno como mamá se preocupa. Uno siempre piensa que puede pasar cualquier situación. Por ejemplo, un golpe mal dado puede provocar algo en el cerebro de mi hija y eso me preocupa demasiado. Siempre me altera los nervios verla pelear, pero siempre vamos a apoyarla, porque sé que dará lo mejor”, dijo Acevedo.

Juliana 'China' Rodríguez derrotó por nocaut técnico a la panameña Sayda Mosquera y se coronó campeona mundial Oro de las 118 libras de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB). Fotografía: Albert Marín

“Mi hija me dice que esté tranquila, me reitera que se va a cuidar, que hace su tarea y estudia a su rival. Sin embargo, como mamá uno se angustia muchísimo, porque es un deporte muy rudo, son golpes fuertes y pueden ocasionar una lesión, la cual la persona no pueda superar y es algo que a uno siempre le preocupa”, acotó.

A pesar de las desilusiones que la China Rodríguez vivió en el pasado, su madre siempre estuvo allí para consolarla y animarla, como cuando quedó fuera de los Juegos Olímpicos.

“Juliana lloró amargamente, todas sufrimos muchísimo cuando no la llevaron a la olimpiada. No fue fácil, se sintió traicionada por las personas en que confiaba. La Asociación de Boxeo la discriminó, la traicionó, la humillaron por ser una boxeadora de carácter fuerte. Ella es muy humilde, pero no se va a dejar de otras personas que le quieran hacer daño”, recordó Acevedo.

“En el pasado derramamos lágrimas de sangre, porque hemos vivido situaciones muy difíciles. No solo por mi enfermedad, sino también por otros aspectos personales, pero eso no ha impedido que ellas cumplan sus metas, porque mis hijas son muy dedicadas, esforzadas, disciplinadas y muy positivas, por lo que van a lograr lo que ellas se propongan”, subrayó.