Roma, Italia
El alemán Alexander Zverev, de 20 años, conquistó este domingo el primer torneo Masters 1000 de su carrera al derrotar en la final de Roma al número 2 del mundo, el serbio Novak Djokovic, por 6-4 y 6-3.
Zverev, 17º jugador mundial, había ganado ya tres títulos en el circuito ATP, en San Petersburgo en 2016 y este año en Montpellier y Múnich.
Nunca se había impuesto en ningún Masters 1000, la segunda categoría de torneos en importancia por debajo de los Grand Slam.
El joven prodigio alemán, llamado a ser una de las estrellas de los próximos años, se había convertido el sábado en el jugador más joven en disputar una final de un Masters 1000, un honor que ostentaba hasta entonces el propio Djokovic, desde que jugó la de Miami en 2007, con 19 años.
Djokovic llegaba a la final tras tener que encadenar el sábado el desenlace de su duelo de cuartos de final ante el argentino Juan Martín Del Potro (6-1, 6-4) y luego su partido de semifinales, en el que arrolló a otro joven de gran proyección, el austríaco Dominic Thiem (6-1, 6-0).
Pero esta vez el serbio, impreciso ante un adversario insensible a la presión, no encontró la fórmula para hacer frente a un Alexander Zverev que presentó definitivamente su candidatura a hacer algo grande en Roland Garros, el único Grand Slam que se juega sobre tierra batida.
Por el momento, el alemán entrará el lunes en el top 10 del ranquin mundial.
Zverev acabó con el anhelo de Djokovic de conseguir su quinto título en Roma.
Antes de su gran día, el germano daba muestras de que se tenía confianza para enfrentar a 'Nole', al afirmar: "No miro ese tipo de estadísticas, de quién es el jugador más joven en ganar un Masters 1000 ni cosas así. Solo trato de jugar partido a partido y mejorar".
Mientras que Zverev disfruta su gran momento, Djokovic tomó una decisión importante.
A principios de mayo, el serbio se separó de su técnico Marian Vajda y anunció que va a entrenar con el extenista estadounidense André Agassi, aunque apuntó que todavía no sabe si será una relación "a largo plazo".
"Hablo con André desde dos semanas, por teléfono, y hemos decidido trabajar juntos en París. Así que estará ahí y veremos qué pasa en el futuro. Los dos tenemos ganas de trabajar juntos y de ver dónde nos lleva ello", declaró el serbio justo después de su derrota en la final del Masters 1000 de Roma ante la gran promesa germana.
El Roland Garros comenzará el próximo domingo.